Archivo - Portia Woodman Wickliffe, durante un partido con la selección neozelandesa. - Dennis Agyeman / AFP7 / Europa Press - Archivo
El bronce fue para EEUU con remontada 'in extremis' a Australia
MADRID, 30 Jul. (EUROPA PRESS) -
La selección neozelandesa femenina de rugby 7 ha conquistado este martes la medalla de oro en los Juegos Olímpicos de París (Francia), gracias a su victoria en la final por 19-12 ante el sorprendente combinado de Canadá, mientras que el bronce ha sido para Estados Unidos tras ganar por 14-12 a Australia en los últimos compases de su partido.
Igual que en el desenlace del torneo masculino, el Stade de France fue el escenario de otro reparto de medallas. Esta vez no vibró tanto el gran templo de Saint-Denis, ya que no estaba en liza la selección local, pero la emoción por buscar el título aderezó toda la tarde de partidos.
Después de vencer por 24-12 a EE.UU. en su semifinal, el conjunto neozelandés se plantó en la gran final, optando a revalidar su oro de Tokio 2020. Por su parte, Canadá dio la sorpresa en la otra 'semi' al batir por 21-12 a las jugadoras 'aussies', citándose también por el oro.
Y ya en ese encuentro por lo más alto del podio, hubo vaivenes en el marcador. Empezó pronto arriba Nueva Zelanda, con un ensayo logrado por Risi Pouri-Lane al minuto y medio, gustándose hasta posar el balón ovalado sobre el césped; ella misma anotó la conversión posterior (7-0).
Entonces llegó la reacción canadiense, merced a un ensayo de Chloe Daniels, quien también aprovechó la conversión (7-7). Justo antes del descanso, Alysha Corrigan robó una pelota y se marchó rauda hacia el ensayo (7-12), que sin embargo no se completó con la conversión.
Pero en la segunda mitad del duelo se pusieron serias las defensoras del oro olímpico. Michaela Blyde consiguió un ensayo y Tyla King volteó el marcador con el pateo de conversión (14-12). Además, apareció en escena Stacey Waaka para imprimir carácter al combinado de Canadá.
Un ensayo suyo puso el 19-12 en el electrónico del Stade de France y, en los instantes definitivos, su apoyo en defensa se celebró como si de otro ensayo se tratase. Manejando bien su última ofensiva, Nueva Zelanda amarró el triunfo y con ello otra medalla de oro olímpica en sevens.