MADRID, 2 Jul. (EUROPA PRESS) -
El tenista español Rafa Nadal ha caído eliminado este jueves en segunda ronda del torneo de Wimbledon, tercer 'Grand Slam' de la temporada, después de perder ante el alemán Dustin Brown (5-7, 6-3, 4-6 y 4-6) y al no solventar los titubeos mostrados desde los primeros compases del duelo.
Nadal, doble campeón sobre la hierba del All England Tennis Club (2008 y 2010), no dio así continuidad a su certero debut del pasado martes frente al brasileño Thomaz Bellucci. Estuvo muy exigido por un rival bastante incómodo, y que logró desconcertar con su peculiar estilo de juego al español.
Al balear le volvió a faltar más solidez en su servicio, con el que firmó discretos porcentajes y con ello revivió las malas impresiones ante Bellucci en dicha estadística. Si bien pudo solucionar el debut hace un par de fechas, en esta ocasión la ausencia de ritmo fue una losa pesada para Nadal.
Tras un arranque de partido de mero tanteo, Brown perdió en blanco su saque en el tercer juego y luego el manacorí consolidó tal situación (3-1), presagiando problemas para el alemán. Pero nada más lejos de la realidad, porque Brown forzó idéntica coyuntura a su favor tres juegos más tarde.
Ahí, el germano rompió en blanco el servicio de su oponente y volteó el marcador al apuntarse el siguiente juego por la vía rápida (3-4). Brown demostraba en la pista que su anárquico método de juego, raudo en la búsqueda del 'saque+volea', perturbaría todo el tiempo la tranquilidad de Nadal.
Ambos jugadores no se otorgaron bolas de 'break' en las pugnas posteriores, hasta que Brown selló al resto su triunfo en el set inaugural. Durante el duodécimo juego (5-7), el teutón se benefició de su segunda tentativa para consumarlo y adelantarse en el estadio central del All England Club.
El de Manacor intentó reiniciarse a sí mismo en la segunda manga, borrando las dudas que empezaban a brotar en torno a su 'drive'. Las múltiples aproximaciones de Brown a la red cortaban la progresión de Nadal con su estrategia ofensiva, amén de centrar sus esfuerzos en cómo parar a un adversario en aparente estado de gracia.
Así las cosas, Nadal repitió ventaja en el marcador como en el set inmediatamente anterior. Quebró el saque del alemán en el tercer juego, pero esta vez no dejó que esa distancia menguase. Sin alardes, pero también sin dar oportunidad de rotura, el balear convirtió su tercer 'break point' en el noveno juego; con ello se adjudicó el parcial (6-3) y recobró esperanzas de éxito.
BROWN DESESPERA A NADAL EN LA RED
Sin embargo, el mallorquín seguía sin hallar el suficiente confort sobre la hierba londinense. El tercer set vislumbró por enésima ocasión a un Brown muy, muy decidido en ataque, y ejecutando golpes poco ortodoxos pero casi siempre eficaces en las cercanías de la red.
En esa tercera manga, el teutón apenas experimentó sufrimiento a la hora de sacar; de hecho, no consintió ni una sola pelota de quiebre durante los 42 minutos que duró el set. En el quinto juego, Nadal fracasó en su servicio (3-2) y el germano administró tal crédito de cara a ratificar el posterior 4-6.
Ese estado de gracia ya era una más que notable realidad, con Brown cada vez más cerca de dar la sorpresa; merodeaba la oportunidad de eliminar a un tenista que le saca 92 puestos en el ranking mundial de la ATP. Y mejor no pudieron empezar sus aspiraciones en el cuarto parcial, ganando el naciente juego al resto y consolidando con sencillez dicha tesitura (2-0).
De ahí hasta el punto definitivo, Nadal se mostró incapaz de alterar a su rival y de sonsacarle alguna bola de 'break'. Un último arrebato del balear evitó que Brown corroborase su triunfo en el noveno juego; no en vano, el manacorí salvó dos 'match points' y encendió al público del estadio central.
Pero ya era tarde y, en el décimo juego, el teutón transformó su tercera oportunidad de cerrar el encuentro. La amarga derrota del tenista de Manacor despierta viejos fantasmas en hierba, pues no ha alcanzado las rondas finales de Wimbledon en las últimas ediciones; concretamente, no lo logra desde que jugase la final de 2011 ante el serbio Novak Djokovic.
Y todo ello a pesar de que las prestaciones de Nadal sobre hierba parecían haber adquirido consistencia. Los reveses de los últimos cursos quedaban lejos el pasado 14 de junio, gracias al título de campeón en el torneo ATP 250 de Stuttgart (Alemania).
Por desgracia para el balear, Brown encarna ya a uno de esos fantasmas por derecho propio tras lo ocurrido este jueves. El alemán venció al español en su primer enfrentamiento entre ambos el año pasado en su debut en Halle, parada previa a este tercer 'grande' del calendario; este 2015, el curioso jugador teutón se medirá al serbio Viktor Troicki en la tercera ronda.