MADRID, 29 Oct. (EUROPA PRESS) -
El joven tenista español Carlos Alcaraz se clasificó este viernes brillantemente para las semifinales del torneo de Viena, puntuable para la ATP y que se disputa sobre pista dura, mientras que Roberto Bautista se despidió en cuartos de final en San Petersburgo, donde cayó frente al croata Marin Cilic en tres sets.
A menos de un mes para que se celebren las Finales de la Copa Davis, el jugador murciano quiere dar argumentos al capitán Sergi Bruguera para que apueste por él. La cita de Madrid se celebra sobre una superficie similar a la de la capital austriaca y, de momento, el de El Palmar está brillando.
El pupilo de Juan Carlos Ferrero se metió en sus primeras semifinales de un torneo de categoría ATP 500 y mostró sus progresos ante un rival de entidad como el italiano Matteo Berrettini, al que derrotó en tres sets por 6-1, 6-7(2) y 7-6(5) en dos horas y 42 minutos.
Alcaraz comenzó arrollador en la pista y no le dio opciones a su rival, frente al que sólo cedió cinco puntos con su servicio, pero el finalista de Wimbledon acertó a reaccionar, aunque tuvo que salvar varios momentos delicados en la segunda manga con cuatro bolas de 'break' en contra.
Berrettini, tercer cabeza de serie en Viena, alcanzó finalmente el 'tie-break', donde fue superior (7/2) para llevar el duelo a una tercera y definitiva manga donde el murciano supo mantener la calma tras desperdiciar una rotura de ventaja y un óptimo 4-1.
Muy fiable en el saque hasta entonces, el español perdió por primera y única vez su servicio en el octavo juego y en blanco, pero ese golpe moral no le afectó, aunque tuvo que volver a jugarse su suerte en una nueva 'muerte súbita', que esta vez sí le sonrió (7/5). En busca de la final, se medirá a alemán Alexander Zverev.
Por su parte, en el torneo de San Petersburgo (Rusia), también sobre pista dura cubierta, Roberto Bautista dijo adiós después de perder a manos del croata Marin Cilic. El castellonense, que partía como tercer cabeza de serie, cayó por 4-6, 6-3 y 3-6 en un duelo que se superó las dos horas y media de duración. Su eliminación deja huérfano de españoles el certamen ruso.