MADRID, 28 Sep. (EUROPA PRESS) -
La tenista hispano-venezolana Garbiñe Muguruza recalcó que fue "clave mantener la calma" para sacar adelante su complicado estreno en Roland Garros ante la eslovena Tamara Zidansek, en el que estuvo 3-0 abajo en el tercer y definitivo set, y reconoció que debe "mejorar algunas cosas" de cara a llegar lejos en un torneo con "condiciones difíciles".
"Ha sido un partido de primera ronda muy difícil y creo que ha sido clave mantener la calma. Sabía que tenía que esperar las oportunidades, por lo que he intentado mantenerme tranquila hasta que he tenido la oportunidad y he ido a por ello, pero sienta bien llevarse la victoria", comentó Muguruza en declaraciones facilitadas por su departamento de prensa.
La de Caracas reconoció que el partido, que se alargó hasta las tres horas, fue "un reto físicamente", pero producto sobre todo de que "siempre son díficiles las primeras rondas". En este sentido, cree que su rendimiento fue producto de "un cúmulo de cosas" como "la tensión de estar en un 'Grand Slam' y de jugar un primer partido".
"También enfrentarme a una jugadora desconocida para mí, y creo que ha jugado a un nivel altísimo durante las tres horas del partido. Estoy contenta porque he conseguido ganar el partido, he de mejorar algunas cosas para intentar ponerme en control antes, pero las primeras rondas son siempre difíciles y aunque haya sido un partido largo y duro estoy contenta de haberme llevado la victoria", añadió.
La campeona en París en 2016 remarcó que el nivel en el circuito "ha crecido". "Ahora todo el mundo está mejor físicamente y es una diferencia grande. Al final las diferencias entre las jugadoras buenas y las grandes son pequeñas cosas, por lo que en las primeras rondas puede haber sorpresas ya que no te encuentras rodada y tu rival puede darte un susto. Ya no hay un partido fácil ni sientes que tienes el partido bajo control porque el nivel es realmente similar", opinó.
Muguruza confesó que "antes, quizás emocionalmente" en los momentos claves de los partidos no rendía bien "por una falta de confianza, respeto o nerviosismo", pero que ahora se ve "más rodada". "Este año he jugado partido duros a tres sets y eso ayuda a que cuando llegas a un momento de 5-5 ó 6-6. Hoy he notado que estaba preparada para jugar tres, cuatro sets o lo que hiciera falta", admitió la exnúmero uno del mundo.
Además, no olvida que este año en Roland Garros no hay "condiciones fáciles" y que "es diferente" a lo habitual. "No sólo las bolas, sino la pista, la temperatura, que se juega con luces. No voy a decir que es otro torneo, pero sí muy diferente, sobre todo la temperatura", advirtió.
"Hacía mucho tiempo que no me encontraba jugando un partido oficial con temperaturas tan bajas. Más que la bola, porque cambiamos de bolas cada semana casi, pero la temperatura es algo que uno siente en el partido en el cuerpo. Y jugar de noche también hace los partidos diferentes", sentenció Muguruza.