MADRID, 9 Mar. (EUROPA PRESS) -
La temporada de Masters 1.000 de la ATP arranca en Indian Wells con una cita de dos semanas, con desenlace el próximo 20 de marzo, en la que el número uno del mundo, el serbio Novak Djokovic, sigue siendo el rival a batir, una cita que se antoja un nuevo examen para el tramo dubitativo de la carrera del español Rafa Nadal.
El desierto californiano, en el Tennis Garden, acoge el primero de los nueve torneos de esta categoría, seis en 2015 fueron para el serbio, con el de Belgrado como doble defensor. 'Nole', con un récord este curso de 16-1 en partidos disputados, mantiene un nivel que sólo una infección ocular en Dubai le ha apartado de la victoria.
Aquella derrota obligada ante el español Feliciano López en cuartos de final impidió un pleno de 18 finales en 18 torneos de un Djokovic campeón en 2016 de Doha y el Abierto de Australia. El serbio, que ayudó a su país en el pase a cuartos de final de la Copa Davis el pasado fin de semana, vuelve a escena.
Djokovic busca un récord de cinco títulos en Indian Wells, el tercero consecutivo, en un camino que puede tener mucho color español. Y es que en cuarta ronda Roberto Bautista podría ser su rival y, llegando a unas hipotéticas semifinales, el de Belgrado se mediría con Nadal. Un peldaño que seguro firma a priori el balear.
El ganador de 14 'Grand Slams' aterriza en un torneo que ha conquistado en tres ocasiones con los reveses de la gira sudamericana por tierra. Dos derrotas, ante Pablo Cuevas y Dominic Thiem en Buenos Aires y Río de Janeiro, más la del debut en Australia ante Fernando Verdasco, dejan de nuevo al de Manacor necesitado de triunfos.
Buenas sensaciones y victorias que logró en el tramo final del pasado curso, un año complicado y sin precedentes en cuanto a resultados que aún así supo dejar atrás. En el arranque del nuevo curso, ese trabajo parece tirado por tierra, pero el gen competitivo de Nadal le obliga a seguir buscando su mejor versión.
El número cinco del mundo debutará en segunda ronda con el ganador del duelo entre el dominicano Víctor Estrella y el luxemburgués Gilles Muller. Sin poder mirar más allá de su debut, Nadal tiene un camino exigente con Verdasco, Martin Klizan, Gilles Simon o Kei Nishikori, antes de lo que sería un choque de campeones con 'Nole'.
El segundo cabeza de serie por el lado bajo del cuadro es Andy Murray. También con el pase en la Copa Davis a sus espaldas, el escocés llega fresco tras un parón por el nacimiento de su hija y después de disputar en el mes de enero la final en Melbourne. Mientras, Roger Federer es baja por una rodilla recién operada.
Pese a la ausencia del suizo, entre Djokovic y Murray suman suficiente favoritismo para que los Masters 1.000 sigan la tónica habitual de título para el 'Big 4'. Entre los cuatro mejores, contando con un Nadal quinto ahora del ranking, han ganado 48 de los últimos 52 Masters 1.000.
Con permiso de jugadores en buen momento como Thiem, Isner o Raonic, y los tenistas del 'Top 15' que no fallan a la cita californiana, la 'Armada' cuenta con una amplia representación, con la sensible baja de David Ferrer, y, además de los mencionados, Feliciano, Guillermo García-López, Muñoz de la Nava, Almagro, Íñigo Cervantes, Pablo Carreño, Albert Ramos y Marcel Granollers.
MUGURUZA Y CARLA SUÁREZ, OPCIONES DE TÍTULO
En el cuadro femenino, la cita Premier Mandatory de la WTA está marcada por el anuncio de dopaje por parte de la exnúmero uno del mundo Maria Sharapova. La rusa, que ya era noticia por comunicar su baja por lesión, centra la actualidad del tenis femenino, después de reconocer un positivo de meldonium, en el primer 'grande' del 2016.
En medio de ese polvorín que sacude a la siberiana, el tenis español vuelve a centrar sus bazas en Carla Suárez y Garbiñe Muguruza. La de Las Palmas de Gran Canaria, campeona en Doha y 'Mejor Jugadora' del mes de febrero para la WTA, busca aprovechar su momento mientras que Garbiñe necesita un punto de inflexión en este arranque.
La cita californiana es el regreso a la acción de la número uno del mundo Serena Willimas desde su derrota en la final de Australia ante la alemana Angelique Kerber. La yanqui, dosificando su físico y las rodillas especialmente, busca su primer título del año en un torneo al que regresó el pasado año tras 14 de ausencia por los abucheos que recibió en su anterior participación.