EDIZIONES, 31 May.
Ellos son Quaden Bayles y Buddy y desde que se conocen sus vidas han cambiado a mejor. A mucho mejor, podría decirse. Y es que el pequeño Quaden, de 5 años, quien nació con acondroplasia, una causa común de enanismo, encontró en Buddy, un simpático Shih Tzu con enanismo, todo lo que podía necesitar para auto-aceptarse y superar sus obstáculos.
Los primeros años de vida para Quaden en Brisbane (Australia) no han sido todo lo fáciles que suelen ser para la mayoría de los niños con los que comparte clase en el colegio. El hecho de ser la mitad del tamaño que sus compañeros, las burlas y los comentarios le han hecho cuestionarse muchas preguntas que han llegado a mermar en su autoestima.
Pero esto fue hasta que Buddy apareció en su vida para cambiarla. Buddy tiene 9 años de edad y, al igual que Quaden, tiene enanismo. Este pequeño dato, a priori sin importancia, supuso el aliciente que Quaden necesitaba para comenzar su proceso de auto-aceptación.
Su familia ha contado en entrevistas a varios medios que antes de la aparición de Buddy, no se podía mencionar la palabra "enanismo" en casa. Quaden tampoco podía entender por qué el no iba a llegar a ser tan alto como su padre. Sin embargo, el efecto tan positivo que el Shih Tzu de 9 años ha tenido sobre él, ha cambiado tanto el panorama que ahora Quaden presume de ello y de perro, con el que se identifica de manera positiva.
En cuanto a las oportunidades que ha encontrado Buddy con esta familia, no hay mucho más que decir que lo obvio. Un perro de 9 años, más cercano a la vejez que a la juventud, y con una condición rara ha encontrado un hogar donde es más que querido y apreciado.
Conoce más de su historia en: Facebook e Instagram.