MADRID, 9 dic. (EDIZIONES)
Esta rana de árbol blanca demostró su lado más descarado al morder el dedo de su dueña mientras esta intenta darle de comer.
Ann Dei Gutiérrez, de 22 años, dice que Agnetha, su rana de árbol blanca, de un año, ve bastante mal, por lo que tiende a ser un poco dramática a la hora de la comida, especialmente si son grillos.
Este comportamiento es bastante común en este tipo de animales mantenidos en cautiverio. La mayoría de los anfibios, incluidas las ranas de árbol blanca, toleran bastante bien que las cojan o les den de comer. Y es muy común que se enganchen accidentalmente en el dedo de la persona que le está dando de comer en ese momento.
Es importante saber que no tienen dientes y que, por tanto, no hacen daño si esto sucede.
Ann Dei suele hacer que Agnetha suelte su dedo llevándola hasta su estanque.
Ann Dei dijo: "Le puse a mi rana el nombre de Agnetha Fältskog de ABBA".