MADRID, 11 nov. (EDIZIONES)
Gracie, la shih tzu de Caroline Bartholomew, de Columbus, Ohio, siempre ha sido bendecida con el aspecto de sus ojos desde que era cachorro, hace ahora 14 años.
A Gracie le diagnosticaron degeneración endotelial de la córnea y es propensa a las úlceras en los ojos. Por ello, la perrita recibe pomadas en sus ojos cada día para reducir el enrojecimiento y evitar que estas úlceras aparezcan.
A pesar de ello, Gracie todavía disfruta de la vida, y nunca deja de poner una sonrisa en la cara de los demás.
"He notado tres reacciones principales en los ojos de Gracie: son la risa, el terror o la adoración", dijo Caroline.
"Creo que es preciosa, pero tristemente, no todo el mundo estará de acuerdo", añadió.