MADRID, 3 Feb. (EDIZIONES)-
Scott Lee Jutras, de 39 años, estaba trabajando en un cuadro con una técnica de vertido de pintura, para el que utilizó un recipiente que originalmente contenía rociadores, en su estudio de Winder (Georgia, EE.UU.).
El artista colocó varios colores en capas y luego los vertió todos a la vez, añadiendo algo de blanco y otras gotas para hacer un efecto de mármol frío en el lienzo.
Poco después de terminar el cuadro y dejarlo secar, una mosca pasó por allí y se posó en la pintura, dejando un largo rastro tras de sí al intentar escapar de nuevo al aire.
Según ha narrado el propio Scott, le pareció divertida la idea de dejar el rastro de la mosca, como si de una artista más se tratara.