MADRID, 14 Mar. (EDIZIONES)-
La veterana buceadora Charlotte Elliot, de 36 años, estaba observando a los delfines con un grupo de kayakistas cuando, de repente, una joven ballena salió a la superficie del agua en Byron Bay, Nueva Gales del Sur (Australia).
Charlotte realizaba una excursión en kayak de mar con la esperanza de avistar algunos delfines cuando la ballena, de aproximadamente un año de edad, hizo una impresionante entrada y continuó chapoteando y nadando cerca del grupo, rodeándolos varias veces.
"Era hacia el final de la migración de las ballenas hacia el Antártico y no creíamos que fuéramos a ver ninguna", explicó Charlotte.