MADRID 24 Mar. (EUROPA PRESS) -
La seguridad en el hogar es una preocupación constante para muchas personas, y es habitual buscar pequeñas rutinas que nos hagan sentir más protegidos. Una de ellas, especialmente extendida en ciertas viviendas, consiste en dejar la llave puesta por dentro de la cerradura al estar en casa, con la idea de que esto refuerza la protección frente a posibles robos o accesos no deseados. Pero, ¿realmente es una práctica recomendable?
Para responder a esta cuestión, es importante entender cómo funciona el mecanismo interno de la cerradura y qué opinan los expertos en cerrajería y seguridad.
¿QUÉ PASA CUANDO SE DEJAN LAS LLAVES POR DENTRO?
En la mayoría de las cerraduras actuales, cuando se deja la llave puesta en su parte interior, el mecanismo de la cerradura se bloquea automáticamente desde fuera. Esto se debe a un dispositivo interno conocido como "embrague simple", que impide que la llave exterior pueda ser introducida y girada cuando la llave interior está en su lugar. De esta manera, el sistema se cierra, y parece que la puerta está asegurada.
Sin embargo, esta protección no es infalible, según explican los profesionales. En cerraduras de baja gama o en cilindros vulnerables las técnicas para abrir cerraduras sin forzarlas, como el 'bumping' o el ganzuado, dejar la llave por dentro no asegura completamente la resistencia de la puerta. De hecho, hay casos en los que un ladrón podría fácilmente manipular el sistema de cierre, incluso si la llave está puesta.
RIESGOS DE DEJAR LAS LLAVES PUESTAS
- Accesibilidad en emergencias. Dejar la llave puesta por dentro puede dificultar el acceso en situaciones de emergencia. Si un miembro de la familia, especialmente una persona mayor, sufre un accidente dentro de la vivienda y la puerta está bloqueada, los familiares o los servicios de emergencia no podrán entrar rápidamente, lo que podría agravar la situación.
- Desgaste de la cerradura. Los cerrajeros también alertan sobre el desgaste que este hábito puede causar a la cerradura. Dejar la llave puesta constantemente somete al mecanismo a un uso innecesario, lo que acelera el deterioro de las piezas internas y acorta la vida útil del bombín.
- Olvidar las llaves puestas al salir. Si se sale de casa y se olvida que la llave está puesta por dentro, no se puede acceder a la vivienda, lo que obliga a recurrir a un cerrajero e implica un coste adicional.
¿SÍ O NO? LAS RECOMENDACIONES DE LOS PROFESIONALES
Según los profesionales del sector, lo más recomendable es no dejar la llave puesta por dentro, ya que no mejora la seguridad y puede generar más inconvenientes que beneficios. También destacan la importancia de contar con cerraduras de alta seguridad. Los cilindros modernos cuentan con características avanzadas, como sistemas 'anti-bumping', anti-ganzuado, anti-taladro y anti-extracción.
Con estas cerraduras, la protección es mucho más eficaz que confiar en dejar la llave puesta por dentro. Además, siempre es aconsejable cerrar la puerta con llave, dando dos vueltas al mecanismo, incluso si solo se sale por unos minutos.
En definitiva, la mejor forma de proteger un hogar es confiando en cerrajeros profesionales, quienes pueden ofrecer soluciones adaptadas a las necesidades y asegurar que el sistema de seguridad esté siempre actualizado.