MADRID 25 Mar. (EUROPA PRESS) -
La campana extractora es esencial en cualquier cocina, ya que, en óptimas condiciones, se encarga de eliminar humo, vapores y olores durante la preparación de alimentos. Sin embargo, con el tiempo, la acumulación de grasa en sus filtros y conductos puede obstruir el flujo de aire, reduciendo su eficacia. Además, la grasa acumulada también representa un grave riesgo de incendio, ya que es altamente inflamable.
Para evitar estos problemas, es fundamental limpiar la campana extractora con regularidad. Lo ideal es hacer una limpieza superficial de los filtros y la parte exterior una vez por semana, y una limpieza profunda cada tres o cuatro meses, poniendo especial atención al interior y a los conductos de ventilación. Así se garantiza su buen funcionamiento y se prolonga su vida útil.
LOS CRISTALES DE SODA Y OTROS MÉTODOS EFECTIVOS
Existen varias formas de limpiar la campana extractora de manera eficiente. Un truco popular para limpiar los filtros consiste en usar cristales de soda líquida, también llamados Carbonato de Sodio, un potente desengrasante y limpiador multiusos, cuya acción es similar a la del bicarbonato pero algo más corrosivo y potente.
Basta con aplicar el producto sobre los filtros y frotar con un cepillo de dientes, lo que permite que la grasa se disuelva rápidamente. Este truco garantiza que no queden restos de grasa, a diferencia de otros métodos como el uso de lavavajillas.
Además de los filtros, es importante no olvidar la limpieza del interior del extractor, donde también se acumula grasa con el uso. Para ello, puede utilizarse un desengrasante específico apto para superficies internas, o recurrir a métodos caseros como el bicarbonato de sodio combinado con vapor, una alternativa eficaz y económica.
Para aplicar este último truco, basta con hervir agua con varias cucharadas de bicarbonato en una olla durante al menos 30 minutos, permitiendo que el vapor generado reblandezca la grasa adherida y facilite su posterior limpieza.
¿CUÁNDO ES EL MOMENTO DE LIMPIAR A FONDO?
Uno de los primeros indicios es la disminución en la capacidad de absorción del humo, lo que sugiere que los conductos están obstruidos por la acumulación de grasa.
Otro síntoma es el aumento de los olores persistentes en la cocina, que pueden extenderse a otras áreas del hogar si no se eliminan de forma efectiva.
BENEFICIOS DE MANTENER EL EXTRACTOR LIMPIO
Una campana extractora limpia no solo mejora la calidad del aire, sino que también hace que el aparato sea más eficiente. Al eliminar la grasa y los residuos, el extractor puede funcionar de manera más eficaz, lo que mejora su capacidad de absorción de humo y olores. Esto crea un ambiente más agradable en la cocina y en toda la casa.
Además, un extractor limpio ayuda a reducir el consumo de energía. Cuando está libre de obstrucciones, el aparato no necesita trabajar más de lo necesario, lo que a su vez disminuye el gasto de electricidad.