MADRID, 12 nov. (EDIZIONES)
Cuando Christne Reiter, de 34 años, rescató a Rainbow y Penélope, de seis semanas, no se imaginó cómo iba a reaccionar su hija de cuatro años.
La llegada de los gatos llegó a la casa de los Reiter con la condición de que la pequeña River, de cuatro años, tenía que ayudar a su madre a cuidar de los mininos como si fuesen recién nacidos.
El caso es que River se lo tomó al pie de la letra y sorprendió a su madre siguiendo cada noche la misma rutina: la pequeña coge a Rainbow en brazos envuelto en una mantita y le canta "Twinkle Twinkle Little Star" hasta que se duerme.
Esta actitud sorprendió mucho a su madre quien asegura que la niña no para quieta un segundo: "Por lo general, River es una niña con mucha energía, así que verla a un ritmo suficiente relajado como para dormir a un gatito es muy dulce".