El 2% de los hipotecados retrasan el pago de la hipoteca y un 5% de los inquilinos lo hacen con el alquiler

MADRID 26 Ago. (EUROPA PRESS) -

Sólo el 2% de los hipotecados se retrasan con el pago de las cuotas hipotecarias, frente a un 5% de los arrendatarios que lo hacen con la renta del alquiler, según los datos que se desprenden de la red nacional Donpiso, por lo que una entidad financiera corre menos riesgo al prestar dinero a una comprador para la adquisición de una vivienda que un propietario al alquilar su piso a un inquilino.

Según las cifras de la inmobiliaria, el alquiler medio en España es de 850 euros mensuales para un piso promedio de 70 metros cuadrados, mientras que la cuota hipotecaria media es de 650 euros, por lo que pagar la hipoteca es un 23,5% más barato que pagar el alquiler.

La clave, según Donpiso, está en los ahorros necesarios para hacer frente a la entrada para la compra de una vivienda: es necesario contar con una cantidad media en efectivo de 50.000 euros para poder comprar una vivienda con financiación hipotecaria en cualquiera de las grandes ciudades españolas.

A tenor de estas cifras, el subdirector general de donpiso, Emiliano Bermúdez, lo tiene claro: "España es un país de propietarios, con alrededor del 75% del total, y lo seguirá siendo todo el tiempo que pueda".

Así, Bermúdez ha defendido que si el alquiler crece, no es porque la gente "prefiera esa modalidad de vida, es que no le queda otro remedio". "Por eso es imprescindible aumentar la oferta residencial y poner en marcha políticas de ayudas a aquellas personas con alto nivel de formación y unas perspectivas salariales y financieras acordes con sus expectativas y necesidades inmobiliarias", ha justificado el subdirector general.

Teniendo en cuenta que el salario medio neto mensual por habitante en España percibido en 12 pagas es de alrededor de 1.700 euros, los españoles que viven de alquiler invierten el 50% de su salario en pagar la renta por el 38% que dedican los propietarios a pagar las cuotas hipotecarias. Esta es la razón por la que la gran mayoría de la población española no ahorra o lo hace por cantidades mensuales inferiores a los 300 euros al mes.