MADRID, 28 Jul. (EUROPA PRESS) -
Las residencias de estudiantes se consolidan como uno de los activos inmobiliarios que menos está sufriendo el impacto de la Covid-19, con previsiones de 19.000 nuevas camas para 2023, según Deloitte.
Ese aumento arrojará un ratio de estudiante bajo movilidad y cama de 4,3, ya que, según los modelos utilizados, se producirá un incremento de 5.000 nuevos estudiantes requiriendo movilidad en ese mismo periodo. Algunas ciudades como Sevilla o Málaga verán ratios inferiores a 4,0 una vez terminados los proyectos en curso.
Esta es una de las conclusiones de la última edición del informe The Student Accommodation Insights 3.0 realizado por la firma, en el que se analiza de forma detallada la situación y perspectivas del sector en España.
El estudio describe el contexto actual del sector, en el que destaca que, sobre un total de 1.633.000 de estudiantes con los que cuenta España en enseñanzas superiores, 494.000 se encuentran en movilidad. Las residencias de estudiantes ofrecen actualmente con una oferta de camas que alcanza las 97.000, lo que arroja un ratio estudiante bajo movilidad y cama de 5,1.
"Vivimos un extraordinario clima de transformación del parque de residencias, donde los conceptos obsoletos y exclusivos de alojamiento pierden relevancia frente al desarrollo de nuevos formatos en los que la creación de comunidad estudiantil gana un fuerte protagonismo", ha destacado el socio de Financial Advisory de Deloitte, Joaquín Linares.
El estudio ha publicado por primera vez el Índice de Ocupación PBSA, elaborado mediante la captación de datos en más de 19.000 camas aportadas por las principales plataformas del sector.
Conforme a este índice, el sector de residencias de estudiantes se mostró defensivo frente a la crisis de la Covid19, arrojando unas ocupaciones medias de entre el 70% y el 90% dependiendo de la localización. Estas ocupaciones han sido más altas en ciudades secundarias que en Madrid y Barcelona, dónde las residencias acusaron en mayor medida la ausencia de demanda internacional.
Adicionalmente, las ocupaciones alcanzaron mejores cifras (89% y 82% en Sevilla y Málaga) en localizaciones con mayor peso de la universidad pública, aunque tradicionalmente estas localizaciones muestran unas mayores elasticidades al precio.
A pesar del relevante aumento de plazas, el sector entra en una nueva etapa más competitiva y donde la captación de los más de 390.000 estudiantes que aún se alojan en pisos será el objetivo común.
"Con un número tan elevado de estudiantes alojados en el parque de alquiler, este segmento supone una enorme oportunidad para atraer y retener en los nuevos conceptos de residencias y romper así con la tradicional búsqueda de piso en alquiler por parte del universitario de segundo y siguientes años", ha subrayado Linares.
El sector de las residencias de estudiantes parece que se dirige hacia una fase de mayor madurez del mercado, ya que comienza a atraer al capital core (de bajo riesgo) debido a un entorno de bajos tipos de interés a medio plazo y un flujo de caja con reducida volatilidad.
"Dado el esperado contexto de crecimiento económico y bajos tipos de interés, la inversión en Living y muy especialmente en el sector de residencias de estudiantes cobra un papel protagonista en la formación de carteras de inversión por parte de planes de pensiones y aseguradoras, dado el diferencial de rentabilidad y estabilidad en los flujos de caja que proporciona", ha subrayado Linares.
La madurez del sector apunta igualmente, según Deloitte a un entorno más competitivo y una mayor orientación a una oferta de camas con tarifas más asequibles para captar al estudiante de clase media.
"La llegada de nuevas plataformas de gestión de residencias con el objetivo de captar al estudiante de clase media, incrementará en los próximos años la oferta de camas asequibles sin renunciar a todos los servicios y experiencias orientados al Living que ofrecen estos nuevos conceptos", ha explicado el socio de Deloitte.
Por último, el informe también ha señalado que las residencias de estudiantes en España empiezan a alejarse de su tradicional denominación como sector alternativo y comienzan a encuadrarse en el sector Living, que aumentó su papel protagonista en el total de la inversión inmobiliaria en España desde el 7% al 27% entre 2010 y 2020.