MADRID 29 Abr. (EUROPA PRESS) -
Los precios del gas se mantendrán altos hasta 2025, a pesar del reequilibrio de 2023, según el último informe de Crédito y Caución, señalando que la volatilidad del mercado del gas sigue siendo elevada y los precios "muy por encima" de sus medias históricas, tanto en Asia como en Europa.
En concreto, el estudio prevé que la demanda mundial de gas alcance su nivel máximo en los próximos años y empiece a disminuir en la segunda mitad de la década, a medida que las energías renovables ganen cuota de mercado.
Asimismo, los precios del gas se han equilibrado "progresivamente" en diciembre de 2023, con caídas interanuales del 68% en Estados Unidos, del 54% en Europa y del 39% en Asia, a pesar de un año de "fuertes" tensiones derivadas de la invasión rusa de Ucrania.
Así, el informe señala que los mercados mundiales del gas siguen ajustándose a la pérdida del suministro ruso de gas por gasoducto a Europa, repercutiendo en los precios de otras regiones importadoras.
En esta línea, el estudio prevé que después de 2025, la mejora de capacidades de transporte del gas natural licuado reconfigurará el mercado del gas, reduciendo los precios en las principales regiones.
LA DEMANDA MUNDIAL DEL GAS SE REDUCIRÁ UN 7% EN 2030
De acuerdo con las proyecciones incluidas en el informe, la demanda mundial de gas se reducirá un 7% en 2030 y un 42% en 2050 frente a los niveles actuales.
Las previsiones para Europa sitúan la reducción de la demanda del gas en un 28% para 2030, no obstante, en un escenario de emisiones netas cero para 2050, el descenso global alcanzaría el 78% en 2050, según el informe.
Asimismo, el estudio concluye que China, India y Oriente Medio seguirán siendo las principales fuentes de crecimiento de la demanda en las próximas décadas, mientras que Europa, Japón y Estados Unidos registrarán una contracción de la demanda.
Por el lado de la oferta, Estados Unidos es actualmente el mayor proveedor mundial de gas natural, seguido de Rusia e Irán. En el escenario de referencia, el estudio prevé que Rusia sea el mayor proveedor en 2050, seguido de Estados Unidos y Catar.