MADRID, 7 Mar. (EUROPA PRESS) -
La Fundación Renovables ha propuesto que se distinga entre el precio marginal y la retribución en el nuevo diseño europeo del mercado de la electricidad, de forma que no todos los kilovatios por hora (kWh) que se viertan a la red eléctrica sean retribuidos al mismo precio.
En el documento 'Comentarios a la Directiva de Diseño de Mercado de la Electricidad', la fundación propone que se establezcan procesos de competencia para desacoplar los precios del mercado y la retribución de las distintas tecnologías.
Asegura que es necesario distinguir entre el precio del mercado, que refleja el coste marginal del sistema, y la retribución que tendrían que recibir las distintas tecnologías y que debiera ser cercana a sus costes medios. No objeta que el precio del kWh en el mercado pueda ser único y servir como referencia para guiar las decisiones de consumo, pero sí que sea la base para fijar las retribuciones de todas las centrales.
Para desacoplar los precios y la retribución de las distintas tecnologías propone hacer competir a las nuevas centrales para acceder al mercado, por ejemplo, a través de subastas, como ya se hace con las inversiones en renovables, de forma que, a través de la competencia en el momento de la inversión, la retribución de las nuevas centrales reflejaría sus costes medios y se preservarían sus incentivos a producir solo cuando resultara eficiente.
En cuanto a la fijación del 'mix' de generación y de los mecanismos de asignación de nueva generación, la Fundación Renovables advierte de que las inversiones solo se van a llevar a cabo si su retribución esperada es estable, sobre todo cuando la mayor penetración de renovables deprima los precios en el mercado y sea necesario que el regulador ofrezca "señales claras" del valor que aporte cada nueva central de generación.
Para ello, además del precio de la instalación, la seguridad, la protección de la red, la salud, el medio ambiente o la eficiencia energética, propone otros criterios, como la capacidad de respaldo, sistemas de almacenamiento, oportunidad de sustituir a otra tecnología no renovable o capacidad de gestión flexible en caso de que la red no asuma el vertido en un determinado momento. Se trata, en su opinión, de "no dar pasos equivocados apostando por inversiones en instalaciones no renovables que hipotecan el sistema y no tienen el futuro garantizado".