MADRID 30 Oct. (EUROPA PRESS) -
La firma de servicios profesionales Alvarez & Marsal (A&M) ha valorado este miércoles que el proceso de cierre de fondos de inversión es cada vez más desafiante debido a la alta competencia en la industria y la poca diferenciación más allá de la reputación, además de que los inversores demandan más flexibilidad y una mejor gobernanza.
A través de un informe sobre el estado del capital riesgo, han apuntado que la coyuntura actual está limitada a operaciones tradicionales, con la práctica totalidad operando bajo una estructura común de 'General Partners' y 'Limited Partners' (GP y LP, en la jerga).
En paralelo, han constatado que, ante el aumento de las tasas de interés en los últimos años, los fondos buscan formas alternativas de mejorar su flexibilidad y alcance, si bien han matizado a su vez que estas limitaciones dificultan obtener retornos por encima de los índices de referencia.
Con todo, desde la crisis de 2008 han englobado que el mercado ha experimentado un crecimiento considerable, con un aumento estable tanto en el volumen invertido como en la cantidad de fondos cerrados, lo que continúa siendo una oportunidad atractiva de retorno para inversores acreditados.
En ese sentido, han argumentado que, aunque el mercado está mayoritariamente dominado por los Estados Unidos y centrado en inversiones internas de las principales economías, "aún hay espacio para la expansión".
En concreto, han señalado que las operaciones actuales están empezando a introducir tecnologías emergentes en sus enfoques de inversión pero que falta explorar cómo estas tecnologías pueden ayudar a ofrecer productos mejores, más allá de los retornos.
LA TOKENIZACIÓN COMO POSIBILIDAD
Según la firma, la tokenización de fondos de capital riesgo puede ayudar a resolver los principales problemas operativos y regulatorios en la creación de estos fondos.
La tokenización, basada en la tecnología 'blockchain', representa para la entidad "el próximo paso" en la innovación de los servicios financieros, fusionando el conocimiento tradicional con nuevas tecnologías para mejorar los procesos y obtener mejores conocimientos.
En esa línea, han enumerado que esta tecnología permite aumentar la transparencia para clientes y reguladores, descentralizar los fondos, otorgar mayor control a los inversores, reducir puntos de fallo o fraude, automatizar procesos mediante contratos inteligentes y mejorar la liquidez del producto, lo que facilita el acceso a un mayor número de inversores.
"Es solo cuestión de tiempo antes de que esta tecnología sea adoptada", han remachado desde Alvarez & Marsal para seguidamente incidir en que "ya proporciona beneficios tanto para inversores como para gestores de fondos, ofreciendo un marco temporal de inversión más flexible debido a la mayor liquidez y gobernanza de los clientes".