La banca española encabeza, junto a la francesa, el ranking europeo de EY de compromiso social

MADRID, 30 May. (EUROPA PRESS) -

Las bancas francesa y española lideran a nivel mundial el Índice de Finanzas Sostenibles de EY, que reconoce el esfuerzo del sector en materia de ESG (criterios medioambientales, sociales y de gobernanza).

Entre las principales economías europeas, Francia, con 7,7 puntos, y España, con 7,4 puntos, lideran las mejores posiciones en materia social. Italia mantiene la misma posición que España (7,4), seguidas del Reino Unido (7,2) y Alemania (7,1).

De esta forma, las entidades europeas obtuvieron una calificación general de 7,4 sobre 10, ligeramente superior a su puntuación del año anterior (7,3) y por delante de sus homólogos de América del Norte (7,2) y Asia-Pacífico (6,3). Sin embargo, el informe revela que la banca de estas dos últimas regiones están avanzando más rápidamente en temas sociales, especialmente vinculados a la diversidad y la inclusión.

Dentro de los parámetros que se han tenido en cuenta para evaluar el ámbito social, España logra una puntuación de 10 puntos en términos de 'privacidad y protección de datos', así como en 'seguridad y salud en el trabajo', y en 'políticas y controles de riesgos sociales'. En el parámetro de 'remuneración competitiva y justa', donde se mide también la brecha salarial, obtiene una puntuación de 9,9 puntos.

En relación con 'Medioambiente y Buen Gobierno', la posición de España con respecto a las principales economías europeas es más rezagada. En concreto, en temas ambientales, la banca española suma 7,1 puntos, frente a los 8,3 puntos de Francia, que encabeza el ranking. En el caso español, se observa que hay recorrido de mejora en lo que concierne a oferta de productos y soluciones 'verdes' para clientes, así como en 'políticas, controles y reporting medioambiental'.

En el ámbito de la 'Gobernanza', España suma 6,3 puntos, frente a los 7,3 puntos del Reino Unido, que ocupa la primera posición. Sin embargo, la banca española obtiene una buena puntuación (9 puntos) cuando se analizan las políticas de compensación. Toda la banca europea puntúa muy bajo (4,4 puntos) cuando se refiere a la diversidad en los consejos de administración.