MADRID 3 Feb. (EUROPA PRESS) -
Santander, BBVA, Caixabank, Bankia, Sabadell, Popular y Bankinter, los bancos que cotizan en el Ibex 35, han cerrado el ejercicio 2016 con un beneficio total de 9.245 millones de euros, frente a las ganancias de 11.651,7 millones de euros de un año antes, un 20% menos, tras los resultados del Popular y en un año en el que los márgenes continúan presionados por unos tipos de interés en mínimos históricos.
Los resultados de las entidades financieras del selectivo español se han visto afectados por las cuentas de Popular, que han arrojado unas pérdidas de 3.485 millones de euros.
Sin tener en cuenta los resultados del Popular, el beneficio de la banca del Ibex 35 alcanzó los 12.730 millones de euros en 2016, un 10% más que los 11.546 millones de un año antes.
El banco todavía presidido por Angel Ron ha anunciado unas pérdidas contables de 3.485 millones de euros en 2016, después de provisiones por un importe de 5.692 millones de euros para reforzar su balance. Pese a ello, la entidad ha señalado que dicho resultado está cubierto con la ampliación y con su exceso de capital.
Banco Santander ha liderado el ranking de ganancias con un beneficio atribuido de 6.204 millones de euros, un 4% más que el ejercicio anterior, gracias al "fuerte" crecimiento de los ingresos por comisiones y a la mejora en la calidad del crédito.
No obstante, estos factores se vieron contrarrestados por la debilidad de algunas divisas con respecto al euro y por la subida de impuestos en Polonia y Reino Unido.
Durante el pasado ejercicio, los clientes vinculados del banco que preside Ana Botín aumentaron en 1,4 millones adicionales y el crédito creció un 2%. Además, la entidad consiguió dar servicio a 125 millones de clientes particulares y empresas en Europa y América.
Teniendo en cuenta solo el negocio de España, que representa un 12% del total del beneficio del grupo, la entidad ha presentado un resultado de 1.022 millones de euros, un 4,6% más que un año antes.
Le ha seguido BBVA, que ha presentado un beneficio neto de 3.475 millones de euros, un 31% más que el año anterior y la cifra más alta desde 2010, pese a tener que realizar una provisión de 577 millones de euros para hacer frente a las cláusulas suelo.
En 2016, el margen de intereses alcanzó 17.059 millones de euros, un 3,9% superior al del año anterior (+14,9% a tipos de cambio constantes), mientras que el margen bruto ascendió a 24.653 millones de euros, lo que supuso un incremento interanual del 4,1%.
En España, el resultado atribuido de 2016 fue de 912 millones de euros, un 16% inferior al del año anterior, impactado por la dotación relacionada con las cláusulas suelo. Si se excluye dicho impacto (404 millones de euros netos de impuestos), el beneficio atribuido habría crecido un 21,2% en términos interanuales.
En tercer lugar se ha colocado CaixaBank, que obtuvo un beneficio de 1.047 millones de euros en 2016, un 28,6% más, con lo que supera los 1.000 millones por primera vez desde el ejercicio 2011.
La entidad ha atribuido el crecimiento a la evolución de los ingresos y los gastos recurrentes, lo que ha provocado que el margen bruto se mantenga estable en 7.827 millones y el margen de explotación alcance los 3.711 millones (+15,3%).
BENEFICIOS POR DEBAJO DE LOS 1.000 MILLONES
Bankia, por su parte, cerró el ejercicio 2016 con un beneficio neto atribuido de 804 millones, un 22,7% menos que un año antes, debido al efecto de la venta de City National Bank (CNB) de Florida. Sin tener en cuenta esta operación, el resultado habría caído un 8,4%.
Los resultados del banco que preside José Ignacio Goirigolzarri se han visto afectados por el entorno de bajos tipos de interés, por la venta de CNB y por las provisiones realizadas para hacer frente a posibles contingencias derivadas de préstamos con cláusula suelo.
Sin embargo, su "confortable posición" de solvencia le ha permitido proponer un incremento del 5% en el dividendo a abonar a los accionistas, que alcanzará los 317 millones de euros.
A continuación se situó Sabadell, con un beneficio neto de 710,4 millones de euros, una cifra un 0,3% superior a la registrada el año anterior. El banco ha realizado dotaciones extraordinarias para hacer frente al posible impacto de las cláusulas suelo.
En concreto, las dotaciones para insolvencias y otros deterioros ascendieron a 1.427 millones de euros a cierre del ejercicio, de los que 490 corresponden al impacto máximo que la entidad calcula por cláusulas suelo. Sabadell ha provisionado un 38,8% menos que el ejercicio anterior.
La entidad que preside Josep Oliu mejoró un 19,8% su margen de intereses, elevó un 5,4% los recursos de clientes en balance y redujo la morosidad al 6,14%.
Bankinter se sitúa a la cola del ranking con un beneficio neto de 490,1 millones de euros a cierre de 2016, un 30,4% más que el año anterior. Esta cifra, que supone un nuevo récord para la entidad, incluye los datos de actividad de Bankinter en Portugal, tras concluirse el pasado 1 de abril la operación de traspaso de todo el negocio adquirido a Barclays en ese país.
Sin tener en cuenta esta operación, el beneficio neto de Bankinter sería de 426,5 millones de euros, un 13,4% superior al de 2015, mientras que el beneficio antes de impuestos alcanzaría los 588,8 millones, un 13,2% más.
El margen de intereses de Bankinter alcanzó al cierre de ejercicio los 979 millones de euros, con un crecimiento del 12,6% sobre el año anterior, mientras que el margen bruto sumó al 31 de diciembre 1.717,4 millones de euros, un 9,5% más que hace un año.