MADRID, 22 Mar. (EUROPA PRESS) -
Las catástrofes naturales provocaron pérdidas aseguradas de 132.000 millones de dólares (122.392 millones de euros), lo que lo convirtió en el segundo año consecutivo que superó los 100.000 millones de dólares (92.721 millones de euros), lo que confirma la tendencia de un aumento medio anual de entre el 5% y el 7% de las pérdidas aseguradas en las últimas tres décadas, según revela el último informe 'sigma' de la aseguradora Swiss Re.
Así, el año pasado acusó unas pérdidas totales (aseguradas y no) de 284.000 millones de dólares (263.329 millones de euros), frente a los 303.000 millones de dólares (280.946 millones de euros) de 2021, un 6,3% menos. Esto contrasta con la media de los diez años anteriores, que fueron de 220.000 millones de dólares (203.987 millones de euros).
"La magnitud de las pérdidas en 2022 no es reflejo de que se hayan producido riesgos naturales excepcionales, sino más bien de una mayor exposición de los bienes a estos riesgos, acentuada por una inflación excepcional", ha afirmado el jefe de Riesgos Catastróficos de Swiss Re, Martin Bertogg. "Aunque la inflación puede remitir, la creciente concentración de valor en zonas vulnerables a las catástrofes naturales sigue siendo un factor clave para el aumento de las pérdidas", ha añadido.
El importante repunte de la inflación en los últimos dos años, que alcanzó una media del 7% en las economías avanzadas y del 9% en las emergentes, ha tenido el efecto de aumentar el valor nominal de los edificios, vehículos y otros bienes asegurables. Además, Swiss Re advierte de que también ha crecido la demanda de coberturas, lo que ha incrementado las pérdidas aseguradas.
La compañía suiza afirma que el evento más destructivo de 2022 fue el huracán Ian, de categoría 4, y que tocó tierra en Florida en septiembre provocando daños asegurados de entre 50.000 y 65.000 millones de dólares (46.361-60.269 millones de euros). Esto convierte a Ian en la segunda catástrofe natural más costosa del registro de 'sigma', por detrás del huracán Katrina.
Asimismo, el grupo de tormentas Eunice, Dudley y Franklin, que azotaron el noroeste de Europa en febrero de 2022, provocaron pérdidas aseguradas combinadas de más de 4.000 millones de dólares (3.709 millones de euros). Por su parte, Francia sufrió tormentas de granizo con destrozos de 5.000 millones de dólares (4.636 millones de euros).
Por otro lado, las inundaciones en Australia de principios de 2022 resultaron en pérdidas aseguradas de 4.300 millones de dólares (3.987 millones de euros), el mayor siniestro del país oceánico. Por el lado opuesto, las sequías y olas de calor sin precedentes echaron a perder cosechas de soja y maíz de Brasil valoradas en 1.000 millones de dólares (927,2 millones de euros).