MADRID, 3 Nov. (EUROPA PRESS) -
DBRS Morningstar considera que los bancos españoles continuarán beneficiándose de las subidas de tipos de interés y que los márgenes netos de interés continuarán con su tendencia al alza en los próximos meses, si bien ha observado "vientos en contra" que podrían impactar al sector, con una economía "más débil", el impuesto temporal a la banca o la posible moratoria hipotecaria para prestatarios vulnerables en España.
El informe elaborado por la agencia de calificación valora de forma positiva el beneficio que la gran banca ha obtenido en España durante los nueve primeros meses del año, de 6.100 millones de euros, frente a los 3.100 millones del mismo periodo de 2021. También el incremento de los márgenes netos de interés que han reportado todas las grandes entidades y el "fuerte" trimestre, con ganancias de 2.400 millones de euros obtenidos solo entre julio y septiembre, "el mejor de los últimos años".
Igualmente, resalta los beneficios que han implicado los planes de reestructuración ejecutados en 2021, ya que las entidades que los han puesto en marcha han visto reducir sus costes operativos, en contraste con aquellos que no han ejecutado ninguno y han aumentado sus gastos entre un 2,4% y un 5% en tasa interanual. Sin embargo, DBRS indica que estos incrementos son "razonables" teniendo en cuenta la elevada inflación en España.
Otro factor positivo es el rápido repunte de los rendimientos de los préstamos, que ha aumentado en 18 puntos básicos en el tercer trimestre frente al segundo trimestre. En cuanto al coste de los depósitos, ha aumentado de media seis puntos básicos con respecto al segundo trimestre, por lo que se mantienen "contenidos".
Para los próximos trimestre, DBRS considera que los bancos españoles seguirán beneficiándose de los aumentos de tipos de interés y que los márgenes netos de interés continúen su senda al alza, a pesar de los últimos cambios anunciados por el Banco Central Europeo (BCE) en su programa de financiación TLTRO III.
A pesar de estas fortalezas, el análisis indica que la gran banca española tendrá que "navegar" en un entorno "incierto con muchos vientos en contra", como la ralentización de la economía, la posible moratoria hipotecaria que está negociando con el Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital y el impuesto temporal a la banca.
La firma prevé que el entorno macroeconómico se ralentice en España lo que, junto a la elevada inflación, podría llevar a aumento de las provisiones por pérdidas crediticias. "El coste del riesgo, en forma consolidada, ya ha ido aumentando en los últimos trimestres, aunque todavía se mantiene por debajo de los niveles previos a la pandemia", explica.
Con respecto a la actividad comercial, DBRS Morningstar afirma que hasta septiembre se ha registrado una dinámica "muy sólida" y que la perspectiva para el cuarto trimestre son buenas, tal y como han expresado las entidades durante las presentaciones de sus resultados la semana pasada.
Sin embargo, los últimos indicadores apuntan a una de desaceleración "sustancial" en los volúmenes de nuevos préstamos y de un endurecimiento significativo en la concesión de créditos en todas las actividades.
Por último, en cuanto al impuesto a la banca que actualmente está en tramitación parlamentaria, la firma señala que reducirá la flexibilidad de los bancos para hacer frente a un entorno económico incierto. Por el contrario, no prevé un impacto significativo de las medidas para aliviar a los clientes hipotecarios vulnerables, al considerar que el perímetro de clientes sería "bastante limitado".