MADRID, 22 Nov. (EUROPA PRESS) -
Los depósitos a la vista continúan aumentando en detrimento de los depósitos a plazo y suponen ya el 80% del total debido al entorno de bajos tipos de interés, cercanos a cero o incluso negativos, que han modificado la estructura de los recursos de clientes gestionados por la banca.
Así se desprende del último número de Cuadernos de Información Económica, editado por Funcas, que apunta que se ha producido un sesgo a favor de los que se gestionan fuera de balance (fondos de inversión) y de los depósitos a la vista.
La norma histórica que rige varios países europeos es el de una ratio aproximadamente del 60/40 entre depósitos a plazo y a la vista, por lo que el 80% en el que se sitúa en España es un nivel que nunca se había alcanzado antes ni en el país ni en la eurozona.
El cambio en la estructura de depósitos ha permitido a las entidades optimizar sus costes financieros en un contexto de bajos tipos de interés, pero incorpora un factor de vulnerabilidad ante una nueva política monetaria.
"La sensibilidad de los depósitos a los tipos de interés provoca un trasvase de fondos hacia el plazo, que será muy sensible a la gestión que las entidades realicen de sus recursos de clientes, pero que dará lugar a un incremento del coste del pasivo", explican Ángel Berges, Fernando Rojas y Federica Troiano, autores del artículo.
Tal y como apuntan los expertos, los resultados de los últimos test de estrés a la banca señalaron que la mayor parte del sector bancario europeo -incluidas las entidades españolas- cuenta con más capacidad de resiliencia y capital suficiente para afrontar potenciales escenarios macroeconómicos adversos.
No obstante, hay dos excepciones: Italia, donde la crisis bancaria no se considera aún resuelta y pende de un importante nexo entre deuda pública y deuda bancaria, y Reino Unido, que aparece en escena con algunas entidades que presentaron dificultades para afrontar condiciones macroeconómicas adversas.