MADRID, 24 Mar. (EUROPA PRESS) -
Deutsche Bank ha contenido su desplome al 8,53%, a pesar de acercarse al 15% en algunos momentos de la jornada, en la que, incluso, el propio canciller de Alemania, Olaf Scholz, ha afirmado desde Bruselas que Deutsche Bank es una entidad "rentable", por lo que "no hay razón" para estar preocupados.
La situación actual "no parece venir de un contagio financiero real", sino que es producto de posiciones especulativas de los bajistas y por una hipersensibilidad por las noticias recientes sobre los bancos que hacen que el mercado "sobrerreaccione", cree Enrique Reina, socio de la consultora financiera Accuracy.
"Deutsche Bank lleva tiempo considerado como un banco no muy robusto, en particular, siempre han existido dudas sobre su negocio de banca de inversión", ha explicado Reina. Este ha puesto como ejemplo las 'autocalls', que necesitan modelos de valoración complejos (como Heston Stochastic Volatility Model) y que "pueden tener oscilaciones de valor debido a esta incertidumbre en la valoración". Sin embargo, la entidad germana presenta ratios de solvencia "buenos", ha resumido.
"Deutsche no es el próximo Credit Suisse", han opinado de forma similar Stuart Graham y Leona Li, de la consultora Autonomous. Así, los analistas no creen que haya ningún otro banco europeo en riesgo, pues no existen vulnerabilidades por el lado de la rentabilidad, como en Credit Suisse, ni por el lado de préstamos de alto riesgo, como en el caso de los bancos regionales de Estados Unidos. Además, Deutsche Bank cuenta en estos momentos con unas reservas de efectivo mucho mayores a las que tenía ante de la crisis financiera de 2008, por lo que "las preocupaciones de los inversores parecen estar erradas".
Por otro lado, el mayor banco de Alemania, cuyo coste de los seguros de garantía frente a impago (CDS) han registrado un fuerte incremento, ha anunciado este viernes su intención de amortizar anticipadamente 1.500 millones de dólares (1.379 millones de euros) en deuda subordinada de nivel 2 de tasa fija, con vencimiento en 2028, el 24 de mayo de 2023 al 100% de su monto principal, junto con los intereses devengados hasta, pero excluyendo, la fecha de rescate.
'NÚMEROS ROJOS' EN LAS BOLSAS
Las turbulencias en Deutsche Bank han afectado a la cotización de los principales bancos del Viejo Continente, que han vuelto a registrar fuertes caídas este viernes, lo que sugiere que las recientes intervenciones por parte de las autoridades financieras no han calmado los nervios de los inversores, después de que los grandes bancos centrales hayan continuado subiendo los tipos de interés a pesar de las turbulencias desatadas por la quiebra del Silicon Valley Bank (SVB) y el Signature Bank en Estados Unidos y el rescate de Credit Suisse.
De este modo, el índice Euro Stoxx 600 para el sector bancario ha registrado al cierre una caída del 2,53%, con Sydbank a la cabeza de los descensos, con una caída del 10,88%, seguido del escandinavo Nordea, que ha hecho lo propio con un 8,54%.
Después, el suizo UBS ha cerrado con un descenso del 3,55%, mientras los títulos del francés Société Générale y del alemán Commerzbank han perdido un 6,13% y un 5,45%, respectivamente. Los títulos del italiano UniCredit también han bajado un 4,06% y los del galo BNP Paribas un 5,27%.
Asimismo, las acciones de otras grandes entidades bancarias europeas como Intesa Sanpaolo, ABN Amro o ING han registrado caídas superiores al 2% y 3%.
En el caso de España, Bankinter encabezaba las caídas al cierre de la sesión con un descenso del 5,38%, seguido de BBVA (-4,43%), Banco Sabadell (-4,28%), Unicaja Banco (-4,06%), Banco Santander (-3%) y CaixaBank (-2,95%).