El presidente del FROB abre la puerta a ajustes adicionales en las cajas catalanas tras suspender los test de estrés
MADRID, 7 Sep. (EUROPA PRESS) -
El subgobernador del Banco de España y presidente de la Comisión Rectora del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), Javier Aríztegui, considera que, aunque ha "mejorado mucho", la situación de las cajas de ahorro, sigue siendo "complicada" y estas entidades no podrán emitir cuotas para financiarse hasta que no termine el proceso de reordenación del sector, "en tres o cuatro meses", apesar de los buenos resultados en los test de estrés.
Así lo ha trasladado en su comparecencia a puerta cerrada ante la subcomisión de la Cámara Baja encargada de supervisar las operaciones del Fondo, según aseguraron fuentes de los grupos parlamentarios asistentes a la reunión, ante los que Aríztegui ha remarcado que, en cualquier caso, el Banco de España estima que las necesidades de financiación de las entidades no superarán los 16.000 millones de euros, que están cubiertas por el FROB y el Fondo de Garantía de Depósitos (FGD).
De este importe ya se han empleado 12.400 millones, con lo que quedan 3.600 millones para hacer frente a las necesidades de capitalización adicional que requerirán las entidades que suspendieron los 'test' de estrés a finales de julio, que el Ejecutivo estima en 1.400 millones.
Ante el escepticismo de los grupos por estas cifras, Aríztegui ha explicado que todavía no se ha producido ninguna petición formal al FROB y que las entidades pueden acogerse a la vía privada para captar financiación.
1.300 MILLONES MÁS PARA CAJAS CATALANAS.
Entre estas cinco entidades, todas ellas resultantes de fusiones de cajas, figuran las derivadas de la integración de Caixa Catalunya, Tarragona y Manresa, y de Caixa Manlleu, Sabadell y Terrassa (Unnim), que requerirán 1.032 millones de euros y 270 millones de euros, respectivamente.
Precisamente, la comparecencia de Aríztegui tenía como objeto explicar la compra de participaciones preferentes convertibles en cuotas participativas con el fin de permitir la recapitalización de estos dos grupos de entidades. A finales de julio el FROB hizo efectivas las compras, que supusieron 1.250 millones para la fusión liderada por Caixa Catalunya y 380 millones para Unnim.
Según Aríztegui, la situación después de que las entidades suspendieran los test de estrés hace que tengan que ser "más competitivas", lo que, según interpretan algunos asistentes a la reunión, implica que éstas requerirán ajsutes adicionales de plantillas y números de oficinas.
Los argumentos de Aríztegui han satisfecho al portavoz del grupo parlamentario de CiU, Josep Sánchez Llibre, quien ha calificado como "muy positiva" la marcha del proceso de reestructuración y las medidas adoptadas por el Banco de España en especial para dotar de liquidez finaciera alas entidades catalanes.
LA OPOSICIÓN CREE QUE EL FROB CONTRADICE LA TASA BANCARIA.
Los grupos aprovecharon la presencia de Aríztegui para plantear sus críticas a la posibilidad de que España aplique una tasa bancaria, que el PP, en particular, ve "contradictoria" con el FROB, ya que dicha tasa restaría capital a las entidades, lo contrario que el Fondo de Reestructuración.
Aríztegui no ha entrado a precisar los planes del Gobierno y el Banco de España al respecto, si bien se ha limitado a explicar las tres distintas posibilidades que existen: la aplicación de una tasa sobre las transacciones, a imagen de la conocida de la 'tasa Tobin', la ampliación de las aportaciones de las entidades al Fondo de Garantía de Depósitos (FGD) o la creación de un nuevo Fondo con un funcionamiento similar a éste.