SEVILLA, 22 Ene. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la Asociación Española de Banca, José María Roldán, ha expresado su deseo de que el programa de compra de deuda pública que podría anunciar hoy el Banco Central Europeo (BCE) y cuya cuantía, según los analistas, podría rondar los 50.000 millones de euros mensuales, sirva para impulsar el crédito para la actividad empresarial.
Así lo ha señalado en una conferencia sobre 'Los riesgos y oportunidades del sector bancario español en el marco de la unión bancaria', dentro del desayuno del Club de Directivos Andalucía, organizado por el Instituto de Estudios Cajasol.
Por otra parte, ha apuntado que "nada volverá a ser lo que fue" tras el periodo de crisis y la reestructuración financiera y ha hecho hincapié en 2014 como el año en que se inició el proceso de recuperación económica.
De esta manera, ha afirmado que "lo peor ha pasado", aunque ha advertido de que sería "un error pensar que no queda nada por hacer" porque "no quedan años, sino décadas, para hacer frente a las vulnerabilidades" del país, como son el paro o la deuda externa. Así ha saludado que España sea el país que exhibe más crecimiento económico, un dos por ciento, lo que permite la creación de empleo.
Tras llamar la atención sobre el "duro y exigente" proceso de reestructuración del sector financiero, ha apuntado los resultados que ya se están dando, como son un repunte del flujo de crédito, y estructuralmente, con un modelo de negocio "resistente".
De cara a 2015, ha señalado que las incertidumbres externas son menores, con un precio del petróleo a la baja, lo que conlleva un impulso del PIB mundial, y existen elementos para impulsar la economía, como la depreciación del euro, la moderación salarial y el aumento de la financiación.
En este sentido, ha asegurado que "los bancos tendrán y tienen capacidad más que suficiente para atender la demanda de crédito solvente", punto en el que ha señalado que "siempre habrá gente que vea rechazada su petición de crédito", porque "un error de un dos o tres por ciento en una cartera de pymes, se paga", por lo que ha destacado "el rigor a la hora de seleccionar los créditos que se dan".
De esta manera, ha apuntado que, en estos momentos, se produce un 50 por ciento de rechazos, mientras que en la época de la 'burbuja inmobiliaria' el rechazo era del 40 por ciento.
Preguntado sobre la litigiosidad frente a productos financieros, Roldán ha señalado la necesidad de completar el sistema de protección formal, aumentar la educación financiera como elemento preventivo y mejorar la formación de la red bancaria.
"REGULACIÓN CON LÍMITES"
También ha criticado que el nuevo enfoque del sector financiero con una reiterada regulación, aunque "saludable", a su juicio, debe tener "límites" porque puede ser "contraproducente".
Por último, Roldán ha insistido en la "alta presión" de los bajos tipos de interés en la cuenta de resultados de los bancos y ha mostrado su deseo de que la banca española sepa "leer el camino" de cara al futuro y sea "robusta, eficaz y rentable", camino en el que no descarta nuevas fusiones.
En cuanto a los bajos tipos de interés que presionan los márgenes de los bancos, ha señalado, una vez preguntado por el Ente de Crédito Andaluz (ECA), si este instrumento "realmente" podrá diferenciarse y mejorar a la banca.