MADRID, 18 Nov. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la Asociación Española de Banca (AEB), José María Roldán, ha pedido armonizar las normas contables entre las entidades bancarias sometidas a la supervisión directa por el Mecanismo Único de Supervisión y aquéllas que lo serán por el BCE, pero a través de las autoridades competentes nacionales.
Roldán ha subrayado esta necesidad para garantizar una "adecuada" supervisión de solvencia. El presidente de la AEB ha enfatizado en la importancia de los aspectos contables, a los que ha calificado como "un auténtico elefante en la habitación".
"La contabilidad es el tejido con el que se fabrica la solvencia bancaria. Debemos preguntarnos si pueden convivir en el medio plazo entidades sometidas a las Normas Internacionales de Contabilidad y otras sujetas a estándares contables nacionales", ha afirmado Roldán durante su intervención en la 17ª 'Euro Finance Week', que se celebra en Francfurt.
En concreto, el presidente de la AEB ha expresado su "preocupación" por la introducción de las provisiones basadas en pérdidas esperadas en las IFRS (International Financial Reporting Standard), puesto que ha considerado que este hecho aumentará "aún más" la distancia entre los estándares aplicados por cada uno de estos dos grupos de entidades.
Roldán ha repasado los retos a los que se enfrentan las instituciones menos significativas de la eurozona, esto es, las que serán supervisadas por el BCE pero a través de las autoridades competentes nacionales, tales como el Banco de España.
Entre las dificultades a las que se ha referido, el presidente de la AEB ha señalado las de tipo operativo, como puede ser el entorno de bajos tipos de interés o la "escasa pujanza" de la demanda de crédito; las de carácter estructural, de las que destacó la sobrebancarización en Europa, y finalmente las derivadas del proceso regulatorio acometido en los últimos años.
En este ámbito, ha recordado la puesta en marcha del Mecanismo Único de Supervisión (MUS) y la necesidad de adaptarse a nuevas normas, como Basilea III y la Directiva de Resolución.
"Europa ha decidido aplicar un sistema de supervisión única en la eurozona, bajo el paraguas del BCE. Cometeríamos un error si subestimáramos la importancia de la supervisión indirecta de las entidades menos significativas, puesto que, si bien la supervisión permanece en las autoridades nacionales, se realiza aplicando el nuevo manual de supervisión para la eurozona y bajo la responsabilidad del BCE", ha concluido.