MADRID, 20 Ene. (EUROPA PRESS) -
Los gestores de fondos europeos consultados por Bank of America (BofA) para su encuesta de enero han agravado su apuesta por infraponderar al mercado bursátil español en 2024 y lo han situado como el segundo destino de inversión menos atractivo tras Italia.
Con todo, pese a que el dato de enero ha sido peor que el diciembre y se sitúa próximo al de noviembre -todavía le quedaría un trecho para igualar el sentir bajista de octubre-, España ya no es considerado el peor destino de inversión, tal y como arrojó la encuesta de diciembre, ya que Italia ha sido en esta ocasión la peor parada.
De su lado, la bolsa alemana ha cambiado de signo y, tras haberse decantado los gestores por sobreponderarla el pasado diciembre, ahora la han castigado con una infroponderación que la sitúa justo debajo de la española.
Por contra, el sondeo, en el que participan un total de 256 gestores con activos bajo gestión valorados en 669.000 millones de dólares (614.700 millones de euros), ha situado a la bolsa británica como la más atractiva de cara a los próximos doce meses hasta el punto de que han duplicado la apuesta de sobreponderar de diciembre.
Tras la británica, los gestores han destacado al parqué suizo, que ha mejorado notablemente su marca de sobreponderar e iguala prácticamente al interés por el mercado bursátil londinense, en tanto que las acciones francesas han mejorado a su vez la preferencia de sobreponderar respecto al dato de diciembre.
EVOLUCIÓN MACROECONÓMICA Y DE MERCADO
En la misma encuesta, los gestores europeos han alejado la posibilidad de una recesión en Europa -aunque sí prevén una desaceleración económica- y se han mostrado convencidos de que la inflación europea disminuirá y el Banco Central Europeo (BCE) recortará los tipos de interés a lo largo del año.
En concreto, la tasa de participantes que prevé una recesión europea se ha moderado del 71% al 53%, si bien hay una clara mayoría del 83% que estima que el crecimiento europeo acusará la desaceleración de la actividad económica. De su lado, sólo el 2% de los participantes cree que la economía global entrará en recesión en los próximos doce meses, el nivel más bajo desde junio de 2022.
En lo referente a la inflación, un 86% de los gestores ha apuntado que la inflación subyacente disminuirá a lo largo del año, en tanto que un 71% espera lo mismo a escala global, por lo que ambas consideraciones se sitúan en niveles cercanos al récord.
Ligado a esto, las principales preocupaciones de los gestores se centran ahora en el empeoramiento de la geopolítica (25%) y un aterrizaje forzoso (24%), mientras que la inflación se sitúa en tercera posición con el apoyo de un 21% de los encuestados.
De su lado, una gran mayoría, de hasta el 89%, cree que las tipos de interés a corto plazo bajarán en los próximos doce meses, la proporción más alta registrada, mientras que un 36% cree que los rendimientos de los bonos a 10 años se desvanecerán, cerca de un máximo histórico.
Ante esa coyuntura de previsiones 'macro', y especialmente a pesar de los riesgos a corto plazo, un 72% de los gestores europeos ve un crecimiento para las acciones europeas en los próximos doce meses, el mayor porcentaje en casi dos años.
Con todo, después del fuerte repunte desde octubre, el 56% espera una caída a corto plazo para el mercado europeo, aunque esta cifra es inferior al 65% del mes pasado. Ligado a esto, en la sesión de este martes el Ibex 35, principal indicador del mercado español, cerró por debajo de los 10.000 puntos por primera vez en casi dos meses.
Una pluralidad del 44% considera que las rebajas de beneficios por acción son la causa más probable de una corrección del mercado europeo, seguida por el debilitamiento de los datos macroeconómicos, con un 17%.
LAS DUDAS PASAN DE LAS COMPAÑÍAS 'VALUE' A LAS CÍCLICAS
La encuesta ha arrojado que un 36% de los encuestados ve mayores desventajas para los valores cíclicos europeos en comparación con los defensivos después de la reciente debilidad, por debajo del 59% del mes pasado, pero aún constituyen una pluralidad, según Bofa.
La mitad de los gestores ve, de su lado, desventajas para las acciones europeas de 'value' (valor) frente a las de 'growth' (crecimiento) en respuesta a la postura moderada de los bancos centrales.
Por sectores, los seguros siguen siendo el mayor sector sobreponderado por consenso en Europa, por delante de los servicios públicos (tras un salto en el posicionamiento) y el farmacéutico.
Por contra, y a pesar de la menor preocupación por los valores cíclicos en general, éstos dominan las infraponderaciones, en particular los automóviles, el comercio minorista y los productos químicos.
ENCUESTA GLOBAL
La encuesta de los gestores de fondos globales consultados por Bank of America (BofA) ha revelado un escenario similar a la de los gestores europeos, ya que ofrece una perspectiva "muy optimista sobre los recortes de tipos y el aterrizaje 'suave' de la economía".
En concreto, el 79% de estos inversores prevé una desaceleración suave para este 2024, lo que supone un máximo inédito desde hace nueve meses, en tanto sólo 17% proyecta un aterrizaje 'duro', mínimo a su vez desde hace nueves meses. Así, hasta un 41% de los gestores va más allá y descarta cualquier recesión para el presente ejercicio, lo que supone un máximo nunca visto.
De su lado, una mayoría de hasta el 91% da por sentado recortes de tipos a un año vista -el 87% ya sostenía esa opinión en diciembre-, en tanto que las perspectiva global de beneficios ha mejorado en enero, aunque con los riesgos geopolíticos como principal viento de cola.
Asimismo, los inversores han mostrado por primera vez desde la primavera de 2022 una perspectiva negativa sobre el crecimiento económico de China.
LA VISIÓN DEL BANK OF AMERICA
El economista jefe para Europa de Bank of America, Rubén Segura-Cayuela, aseguró este viernes que no esperan cambios en la política monetaria, ni cambios importantes en la comunicación (pero sí una mayor presión sobre los precios de mercado) por parte del Banco Central Europeo (BCE) la próxima semana, cuando celebrarán su reunión de política monetaria -el turno de la Fed llegará la semana posterior-.
Para el ejecutivo, el BCE "quiere [esperar a] ver los datos de primavera sobre beneficios, salarios e inflación", por lo que mantienen su opinión de que el primer recorte de 25 puntos básicos se producirá en junio.
Con todo, ha avisado de que "dada la rápida desinflación, los riesgos apuntan a una actuación más rápida a partir de entonces".
"Estamos cada vez más nerviosos ante la posibilidad de que los datos obliguen al BCE a recortar una vez en cada reunión posterior, en lugar de trimestralmente, un ritmo acelerado que no esperábamos hasta 2025", ha remachado Segura-Cayuela.