MADRID, 16 Jun. (EUROPA PRESS) -
La inversión ESG ha conseguido mantener su buena salud, a pesar de la invasión de Ucrania y la incertidumbre en los mercados financieros, según las conclusiones de la séptima edición del Observatorio de inversión ESG, que ha sido presentado este jueves.
La crisis provocada por la Covid supuso el espaldarazo definitivo a la importancia de la inversión ESG (medioambiental, socia y de gobierno corporativo) a escala global, después de años marcados por la proliferación de normativas internacionales.
Ese cambio ha sido palpable en las juntas de accionistas de este año, donde el cambio climático ha sido uno de los 'hot topics'.
El informe concluye que, para lograr que se alcancen los objetivos marcados por las instituciones, será clave permitir que los inversores reorienten sus inversiones hacia tecnologías y empresas más sostenibles.
El Observatorio ESG también ha puesto de relieve que esta temática ha pasado de ser consideraba un área de nicho a abarcar una amplia audiencia de inversión que incluye a personas físicas, organismos públicos, grandes patrimonios e instituciones como planes de pensiones, fondos de inversión y fundaciones.
De momento, ascienden a 4.962 las entidades firmantes de los Principios de Inversión Responsable (PRI), impulsados por la ONU, de las cuales 260 son del sur de Europa.