LONDRES, 4 Ago. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno británico ha iniciado el proceso de privatización de The Royal Bank of Scotland (RBS) con la venta de una participación del 5,4% en la entidad a un precio de 2.079 millones de libras (2.959 millones de euros), lo que implica unas pérdidas de más de 1.000 millones de libras (1.543 millones de euros) para las arcas públicas.
La primera venta de acciones de RBS desde su rescate en 2008, que alcanzó los 45.000 millones de libras (64.029 millones de euros), se ha cerrado a un precio unitario de 330 peniques por acción, lo que supone un descuento del 2,25% con respecto al precio de cierre de los títulos del banco escocés este lunes.
Asimismo, el precio pactado para la venta de este 5,4% de RBS se sitúa un 34% por debajo de los 502 peniques de media por acción abonados por el Gobierno británico durante el rescate de la entidad.
Tras la venta de esta participación, que contó con Citigroup Global Markets Limited, Goldman Sachs International, Morgan Stanley & Co. International y UBS Limited como colocadores, el Estado aún mantiene el control sobre el 72,9% del banco.
En el marco de la operación, UK Financial Investments (UKFI), el vehículo financiero que gestiona la participación del Gobierno británico en RBS, y el Tesoro de Reino Unido han asumido el compromiso de no vender más acciones de la entidad durante al menos los próximos 90 días.
Un informe de Rothschild sobre la reprivatización de los bancos rescatados por el Estado durante la crisis financiera calculaba que la venta de la participación del Gobierno en RBS podría saldarse con pérdidas cercanas a los 7.200 millones de libras (10.239 millones de euros) para las arcas públicas, aunque éstas se verían más que compensadas por las ganancias al vender los títulos que el Estado conserva en otros bancos rescatados, como por ejemplo Lloyds.