MADRID 31 Oct. (EUROPA PRESS) -
La gestora Schroders ha remarcado este jueves en un informe con motivo del Día Mundial del Ahorro que los depósitos en efectivo no son una forma segura para conservar el patrimonio en el largo plazo, ya que su valor se ve diluido por la inflación.
En este sentido, la firma ha apuntado que, si bien este producto es una forma muy útil de reservar dinero para gastos a corto plazo o emergencias, no es óptimo para el largo plazo y objetivos como comprar una propiedad, pagar los estudios o ahorrar para la jubilación.
En ese sentido, ha puesto como ejemplo que un ahorro de 10.000 dólares se vería mermado hasta los 9.057 dólares tras un periodo de cinco años con una tasa de inflación al 2%, que es el rango que aspiran a manejar los gobiernos y los bancos centrales, en tanto que, en el plazo de 15 años, ese ahorro se vería diluido hasta los 7.430 dólares.
Entrando al terreno de lo concreto, desde la firma han recordado que la inflación es una media de numerosos componentes y que, por ejemplo, durante la crisis inflacionista de 2022 la inflación de los alimentos a escala global fue del 12% de media y la de la energía del 14%.
"Con una inflación de los alimentos del 12%, la cantidad de comida que se puede comprar por cada dólar se reducirá casi a la mitad en cinco años; al cabo de 10 años, con un dólar se podrá comprar solo un tercio de la cantidad original", han expuesto.
Por todo ello, han argumentado que para salvaguardar el patrimonio los mejores medios implican canalizar los ahorros a una serie de inversiones, tales como acciones, bonos, bienes inmuebles y otros activos alternativos.
Todos ellos generan rendimientos de distintas maneras y ofrecen una buena oportunidad -aunque no una garantía, como han matizado- de superar la inflación.