Escrivá ve más abstención electoral de jubilados por "desafección" ante la falta de acuerdo en pensiones

El ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá, comparece en Comisión de Seguimiento y Evaluación de los Acuerdos del Pacto de Toledo - Eduardo Parra - Europa Press

Afirma que el borrador alcanzado en 2019 en el Pacto de Toledo es "un buen punto de partida para desarrollar el modelo de pensiones del futuro"

MADRID, 5 Mar. (EUROPA PRESS) -

El ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá, ha informado en el Congreso que en su departamento han detectado que "en las últimas elecciones" hay una "tendencia" de las personas más mayores "a abstenerse más que el resto de los españoles" y ha señalado que cree que la explicación a esta situación se encuentra en la "desafección" producida por la falta de acuerdo en materia de pensiones.

Durante su comparecencia ante la Comisión de seguimiento y evaluación de los acuerdos del Pacto de Toledo, Escrivá ha señalado que se trata de una "situación no deseable" y ha emplazado a los grupos a alcanzar un acuerdo con el fin de poder aprobar medidas en la segunda mitad de este año. Asimismo, ha dicho que considera el último borrador alcanzado en 2019 como "un buen punto de partida para desarrollar el modelo de pensiones del futuro".

"No podemos sorprendernos de que los pensionistas tengan una visión tan preocupante sobre el sistema", ha declarado el ministro, que lamenta esta "injusta situación" por afectar a "colectivos muy vulnerables", por encontrarse en una situación en la que no pueden generar más ingresos.

Durante su exposición, Escrivá ha señalado que la preocupación de la opinión pública sobre el sistema de pensiones se encuentra "en máximos", pues un 12% de los españoles incluyen este tema como uno de los tres principales problemas, después de estar en torno al 3% durante una década. Antes del Pacto de Toledo en 1995, este porcentaje se quedaba en el 8%.

Escrivá ha señalado que en los próximos años el sistema se enfrenta a un incremento importante de jubilaciones --si entre 1995 y 2020 han sido 7,5 millones, hasta 2045 se prevén casi 11 millones--, pero ha recordado que una proyección del gasto en pensiones, revalorizándolas con el IPC, elevaría hasta el 13,5% del PIB su gasto (ahora supone menos del 11%), cuando Francia gasta en 2020 casi un 15% de su PIB y Austria más del 14%.

Asimismo, ha recordado cómo en 1995 las previsiones que se publicaban eran "muy pesimistas" y que, frente a ello, la situación actual del déficit en el sistema público de pensiones se encuentra por encima de las perspectivas más optimistas de entonces, al errar en las previsiones demográficas y migratorias.

"VISIÓN INADECUADA" DE CÓMO ESTÁ LA SEGURIDAD SOCIAL

Sobre la situación de alarma, Escrivá ha señalado que una de las causas es cómo se traslada "innecesariamente" una "visión inadecuada" sobre su situación financiera, al atribuirlo a una cuestión más contable que económica, ya que el sistema "soporta" gastos que no le corresponden.

En este sentido, cree que una vez se vayan desplazando gastos hacia los Presupuestos Generales del Estado (PGE), para que sean sufragados vía impuestos, y no con cotizaciones sociales, se podrá tener una "fotografía más precisa" del estado real de las cuentas del sistema público de pensiones.

Por otro lado, también ha criticado el "alarmismo innecesario" que, a su juicio, generan determinadas recomendaciones dirigidas por las autoridades comunitarias, con arreglo a unas proyecciones y estudios que no cree del todo "atinados", algo que atribuye a una metodología que busca homogeneizar entre distintos países.

Así, ha dicho que sus proyecciones poblacionales "condicionan muchos resultados" y que "en el caso de España son particularmente inadecuadas", lo que genera como consecuencia una "foto inadecuada" de la realidad española. Es más, ha asegurado que "en privado" las instituciones internacionales "reconocen proyecciones que son mucho más afinadas".

AUMENTO DE JUBILACIONES ANTICIPADAS QUE ESPERA ENDURECER

Entre las "consecuencias inaceptables" de la preocupación que se transmite a la opinión pública, ha señalado que se encuentran algunas que afectan directamente a las cuentas del sistema, al propiciar jubilaciones anticipadas voluntarias (un 16% en 2019) y una mayoría de trabajadores que optan por la cotización mínima (85% de los autónomos) pese a contar con "ingresos muy superiores".

Por ello, ha instado a los grupos parlamentarios a "revertir con radicalidad y decisión" esta situación a través de un acuerdo en el Pacto de Toledo, pero también a través de un acuerdo entre sindicatos y patronales en el diálogo social.

Precisamente, con el fin de acercar la edad de jubilación real a la edad legal, tal y como señaló en su anterior comparecencia ante el Congreso, Escrivá ha asegurado que actuarán sobre las penalizaciones que se aplican sobre la jubilación anticipada, una vez evalúen cómo se aplican sobre las bases para el cálculo de la pensión.

Sin embargo, sí que ha calificado como "muy regresivo" el diseño de las jubilaciones anticipadas voluntarias, pues es más beneficioso cuando los coeficientes actúan sobre bases de cotización más altas (mayores rentas y pensiones más altas) que cuando los coeficientes afectan a rentas menores.

También ha asegurado que es necesario completar la legislación con más incentivos para retrasar la jubilación, pues en la Seguridad Social consideran que estas fórmulas han tenido "muy poca aplicación práctica", ante lo cual ven con buenos ojos el fomento de campañas informativas.