MADRID, 11 (EUROPA PRESS)
El mercado laboral español ha demostrado una notable resistencia y dinamismo en los últimos tiempos, a pesar de que España sigue registrando la tasa de paro más alta de la zona euro, según la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), para la que la reforma del mercado laboral, introducida en 2021, contribuye a mejorar la calidad del empleo en el país.
"La reforma del mercado laboral de 2021 contribuye a mejorar la calidad del empleo en España", afirma el 'think tank' para las economías avanzadas en su informe 'Perspectiva de Empleo 2023', donde destaca que un año después de su entrada en vigor, el número de contratos temporales se ha reducido en un 30% y la mayoría de los nuevos contratos son indefinidos, recortando la desproporción de contratos temporales entre España y otros países europeos de la OCDE.
De hecho, según el documento de la organización con sede en París, en el cuarto trimestre de 2022, la proporción de nuevos empleos con contratos temporales fue menor que en el cuarto trimestre de 2019 en 20 de los 28 países con datos disponibles, a pesar del fuerte ciclo económico en ambos períodos y, en promedio, la proporción de nuevas contrataciones con contratos temporales se redujo del 49% al 46%.
"Los mayores descensos proporcionales se registraron en Noruega, España, Suecia, la República Eslovaca e Irlanda, mientras que Lituania e Islandia vieron un aumento en la proporción de nuevas contrataciones con contratos temporales, aunque desde niveles inicialmente bajos", destaca la OCDE.
EVALUACIÓN DE IMPACTO DE LOS FIJOS-DISCONTINUOS.
En este sentido, la OCDE apunta en una versión actualizada del informe que el uso de los contratos fijos-discontinuos, una nueva disposición introducida por la reforma laboral de 2021 para los trabajadores estacionales, puede contribuir a un reducción de la tasa de temporalidad, "una conclusión que deberá confirmarse mediante una evaluación de impacto programada para el 2025 para corregir posibles desviaciones y garantizar nuevos avances".
En general, la organización destaca que el mercado laboral español "ha demostrado una notable resistencia y dinamismo en los últimos tiempos", como demuestra el crecimiento del empleo del 1,2% en el primer trimestre de 2023.
De este modo, la tasa de desempleo española ha alcanzado su nivel más bajo en décadas, situándose en el 12,7%, aún muy por encima de la media de la OCDE y la más alta entre las economías de la zona euro.
En este sentido, tras la sólida recuperación del 5,5% registrada por la economía española después de la crisis del coronavirus, la OCDE prevé que la expansión económica de España se modere hasta el 2,2% en 2023 y el 1,9% en 2024, por lo que anticipa que la tasa de paro del país se mantenga en un nivel relativamente alto (12,6%) durante el resto de 2023.
SALARIOS REALES.
Por otro lado, la OCDE señala la caída de los salarios reales en prácticamente todos los países de la OCDE en el primer trimestre de 2023 como consecuencia del alza de la inflación.
En promedio, los salarios reales cayeron un 3,8% anual en el primer trimestre de 2023 respecto al año anterior entre los 34 países de la OCDE con datos disponibles, mientras que España experimentó un descenso del 1,2% en el año transcurrido hasta el primer trimestre de 2023.
"Este descenso es más contenido que el observado en otros países de la UE debido a la dinámica del crecimiento de los salarios nominales y de la inflación, especialmente durante el segundo semestre del año", explica la OCDE, recordando que, en este periodo, el crecimiento de los salarios nominales aumentó del 3,2% a algo menos del 4%, mientras que la inflación cayó de alrededor del 9% a aproximadamente el 6%, amortiguando la caída de los salarios reales.
Asimismo, a nivel general, la OCDE considera que hay espacio para que las ganancias absorban aumentos adicionales en los salarios, al menos para los trabajadores con salarios bajos.
En este sentido, el 'think tank' apunta que, en promedio en la OCDE, los salarios mínimos legales han aumentado significativamente en los últimos dos años, permitiendo que los salarios mínimos reales se mantengan al ritmo de la inflación mejor que los salarios promedio.
En el caso de España, la OCDE destaca que el salario mínimo nominal ha aumentado un 13,7% desde diciembre de 2020, en línea con la inflación, manteniendo el salario mínimo real constante, subrayando también que, incluso antes de la escalada de la inflación, los aumentos del salario mínimo en España fueron sustanciales, situando el país entre los miembros de la OCDE con el crecimiento más rápido en el salario mínimo legal.