MADRID, 2 Jul. (EUROPA PRESS) -
El secretario de Estado de Trabajo y Economía Social, Joaquín Pérez Rey, ha afirmado este jueves que los datos de paro del mes de junio confirman la tendencia que se inició en mayo de ralentización del incremento del paro.
Así lo ha señalado durante la rueda de prensa de presentación de los datos de paro registrado y afiliación a la Seguridad Social del sexto mes del año.
Rey ha explicado que se ha registrado una particularidad en Valencia, donde se ha llevado a cabo una oferta de empleo público de 1.000 plazas. Al apuntarse los solicitantes al servicio público de empleo estatal (SEPE) como demandantes de empleo se ha generado un incremento de más de 14.000 personas en el colectivo de personas en desempleo que no contaban con empleo anterior.
Según el secretario de Estado, sin este elemento tan localizado y concreto, se hubiese registrado un descenso de 9.000 personas en el mes de junio. "Esto ha hecho que se haya incrementado el colectivo de trabajadores sin empleo anterior y que el paro haya subido por esta circunstancia, pero también por el fin de las actividades académicas ligadas al final del curso escolar", ha añadido.
Además, ha puesto en valor que se ha controlado la hemorragia que la crisis ha producido en términos de empleo gracias a los expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE). "Hemos hecho un extraordinario esfuerzo en las políticas de protección social, que han hecho que la demanda agregada no se desplomase como ha ocurrido en situaciones anteriores y hemos logrado contener la demanda gracias a los mecanismos financiados con dinero público", ha añadido.
Entre marzo y junio, la suma de parados registrados ha superado las más de 616.000 personas por el coronavirus, pero, según el secretario de Estado, las medidas implementadas desde el inicio de la crisis han facilitado que las empresas y trabajadores utilicen ampliamente los ERTE.
No obstante, Rey ha señalado que los datos de junio deben confirmarse en las próximas semanas para que sean indicativos de que la recuperación se está consolidando.
Por otro lado, ha incidido en que los datos muestran la "extrema" exposición del sistema a la precariedad y la necesidad de contenerla.
Ha señalado que un total de 5,9 millones de personas estuvieron bajo el paraguas de la protección en junio, más de 3,3 millones fueron a través de ERTE y más de 2,5 millones de prestaciones que ya se cobraban.
"Este elevado nivel de protección social tiene un traslado directo en el pago de prestaciones", según Rey, que ha resaltado que se pagaron 5.526 millones de euros en prestaciones. Además, ha remarcado que mayo fue el mes en el que se alcanzó el máximo de personas protegidas y que, desde entonces, la reactivación ha permitido que se hayan incorporado más de 1,5 millones de personas que estaban en ERTE.
En esta línea, ha apostillado que es previsible que los datos de junio en cuanto al pago de prestaciones empiecen a marcar una reducción y que las nóminas pagadas por el SEPE se reduzcan en 1.000 millones de euros.
Preguntado sobre la prestación de empleadas del hogar, Rey ha explicado que se tuvo que crear un sistema informático expresamente para esta prestación y que ya se han contemplado un total de 30.020 solicitudes que están en vías de reconocimiento y que empezarán a cobrar ahora a principios de julio.
También ha señalado que el SEPE ha aguantado como "una auténtica trinchera" y que deberá abordar las próximas situaciones con efectivos, por lo que contemplarán si hay necesidad de refuerzo de la plantilla.
Por su parte, el secretario de Estado de Seguridad Social, Israel Arroyo, ha señalado que, aunque todavía se está "muy lejos" de los niveles previos a la crisis, las medidas que se han adoptado han evitado una destrucción del empleo mayor, "pero no han permitido que se destruyeran contratos temporales en el sector servicios".
"Vemos la panorámica general de que se han salvado las relaciones laborales en sectores con contratos indefinidos y empezamos a ver la incorporación de los ERTE", ha añadido.
Asimismo, ha apuntado que es "lógico" que los empleadores estén incorporando a trabajadores que están en ERTE antes que incorporar a otra gente.
LOS TEMPORALES HAN SOPORTADO EL MAYOR PESO DE LA CRISIS
También ha puesto en valor que las medidas han servido, sobre todo, "para parar el golpe en aquellos trabajadores que tenían un contrato indefinido, pero que los que tenían un contrato temporal han sufrido el mayor peso de la crisis.
Por sectores, ha explicado que en el de los alojamientos y hoteles es donde la salida de los trabajadores de los ERTE a la actividad está siendo "significativamente más lenta".
Sobre el mal dato registrado el último día del mes de junio, con casi 100.000 afiliados menos, Arroyo ha subrayado que es un dato "claramente malo" que refleja "un comportamiento bastante perverso del mercado de trabajo, que es la altísima temporalidad que existe en algunos sectores".
No obstante, ha apostillado que básicamente en el día 1 de este mes ya se ha recuperado toda la destrucción de empleo del último día del mes pasado. "Es una característica perniciosa de nuestro mercado de trabajo, pero no es diferente a otros años", según Arroyo.
"Preocupa no tanto la destrucción de empleo, sino la temporalidad", ha señalado Arroyo, que cree que en el caso del sector sanitario estos índices de temporalidad "no son óptimos". "El sector público tiene bastante que hacer y es uno de los factores que en estos momentos se está poniendo de manifiesto", ha añadido.