MADRID, 18 Nov. (EUROPA PRESS) -
El 85% de los españoles ha señalado estar preocupado por el aumento de los precios de la compra diaria, según un estudio elaborado por Deloitte.
En concreto, el 58% ha notado precio más alto cuando ha comprado productos de alimentación, un 40% cuando ha adquirido productos del sector de la moda, un 42% notan el incremento en los restaurantes y un 40% lo ha percibido cuando ha adquirido alcohol y tabaco.
Este estudio, además, señala que los españoles destinan un tercio de su renta a gasto discrecional (aquellos gastos asociados a los deseos y necesidades puntuales), un gasto algo inferior a lo que gastan cada mes a vivienda y alimentación. Asímismo, los españoles dedican un 18% de la renta a viajes, ocio y restauración.
EL CONSUMIDOR, CADA DÍA MÁS SEGURO
Por otra parte, el trabajo destaca la mejora en la percepción de seguridad, superior a la media europea. El 74% de los españoles tiene percepción de seguridad al acudir a una tienda, un 70% a un restaurante o un 65% a un hotel. Solo acudir a un gran evento en persona es percibido como algo seguro por menos del 50% de los españoles.
"La pandemia nos ha transformado completamente y ha hecho que valoremos más las experiencias que las cosas. Somos optimistas y estamos más preocupados por nuestro bienestar", ha apuntado el socio de Deloitte experto en Retail, Bruno Rodríguez.
El estudio, además, también destaca que las personas están ávidas de interacción social y que priorizan más su propio bienestar. Un ejemplo de esto es un aumento de la intención de viajar por parte de los consumidores, especialmente a destinos dentro del territorio nacional (un 44%).
Este predominio de la movilidad de media distancia está haciendo que la larga distancia no se recupere tan rapidamente. "En ciertos sectores, como el del lujo, la recuperación está siendo más lenta y no acabamos de recuperar cuotas de mercado como el estadounidense o el asiático", han lamentado.
PREOCUPADOS POR LA HUELLA CLIMÁTICA
Por último, los consumidores demuestran cada día más mayor preocupación por el impacto social y en materia de sostenibildad que puedan tener sus decisiones de compra. El 73% ha afirmado haber realizado actividades o cambiado ámbitos de compra (como reducir su consumo energético, comprar producto local o reducir su desperdicio alimentario), el 58% ha afirmado haber consumido un producto sostenible en el último mes y un 65% considera el cambio climático como algo acuciante y urgente.
Entre los motivos por lo que los clientes consideran sostenoible un producto destaca el estar hecho con materiales reutilizables (67%) o ser de cultivo sostenible (48%). Además, el 34% declara haber pagado un sobreprecio por haber consumido un producto sostenible.