MADRID 27 Mar. (EUROPA PRESS) -
El primer ministro de Canadá, Mark Carney, ha afirmado que responderá a los aranceles estadounidenses del 25% a la importación de automóviles con medidas similares, pero, también, construyendo una "nueva economía" alejada de Washington, lo cual, ha avisado, llevará un tiempo.
"Lucharemos contra los aranceles estadounidenses con nuestras propias medidas comerciales de represalia que tendrán el máximo impacto en Estados Unidos y el mínimo aquí, en Canadá", ha afirmado en rueda de prensa.
El mandatario esperará hasta la semana que viene para anunciar medidas concretas, pero, por el momento, ya ha asegurado que Canadá deberá reducir "dramáticamente" la dependencia de su vecino del sur y buscar nuevos socios comerciales "fiables".
En este sentido, ha indicado que el Gobierno facilitará inversiones a nivel nacional para forjar una "nueva economía canadiense". Esto incluirá la creación de una cadena de suministros para la industria automovilística que emplee acero y aluminio producido dentro del país.
Así, Carney ha adelantado que se modificará la normativa de contratación pública para apoyar a este sector mediante la adquisición por parte del Estado de 40.000 coches fabricados en Canadá por un monto de 2.000 millones de dólares canadienses (1.294 millones de euros).
No obstante, el sucesor de Justin Trudeau ha reconocido de que levantar una "Canadá más fuerte, más libre y eterna" será complicado al admitir que "no hay ninguna bala de plata ni atajo" para ello.
El líder de la nación norteamericana ha precisado que "entiende y respeta" el objetivo de Donald Trump de apoyar a los trabajadores de Estados Unidos, pero que discrepa de sus métodos y de la "reestructuración" de la economía mundial que su agenda va a brindar.