Aboga por la mediación como una forma "más rápida y barata" que la opción judicial garantizando una solución "razonable y dialogada"
MADRID, 9 Ago. (EUROPA PRESS) -
El Centro Español de Mediación lanzado por la Cámara de Comercio de España y que preside el exministro de Justicia Rafael Catalá prevé contribuir a desatascar en torno a dos millones de casos judiciales, que se han visto paralizados a raíz del confinamiento decretado en marzo para frenar el avance del coronavirus.
En una entrevista con Europa Press, el presidente de este organismo de reciente creación defiende que a la Justicia le interesa en este momento el fomento de la mediación como alternativa de resolución de casos, para evitar el atasco en los juzgados tras haber estado prácticamente paralizados durante cerca de cuatro meses.
Según explica Catalá, el objetivo del Centro es potenciar el uso de la mediación, que, al igual que el arbitraje, intenta solucionar las discrepancias que puedan surgir evitando recurrir a los tribunales de Justicia de una forma "mucho más rápida y barata".
En concreto, frente a los dos o tres años que tarda en resolverse un caso en los juzgados, la mediación, a través del consenso y diálogo entre las partes, puede resolverlo en cuestión de meses, garantizando también una solución "razonable, madura y dialogada".
El problema de este método es que, incluso existiendo una ley de mediación que data de 2012, todavía es desconocido en España, por lo que el exministro aboga por cambiar la cultura de acudir primero a los juzgados a denunciar cualquier cosa por recurrir a la mediación.
Actualmente, esta alternativa tan solo acapara unas decenas de casos en todo el país, frente a Italia, por ejemplo, donde este método ha empezado a cuajar recientemente y ya resuelve más de 200.000 casos cada año, o en Reino Unido o Estados Unidos, donde es muy habitual.
DEFINIRÁ SUS OBJETIVOS EN SEPTIEMBRE
La Cámara de Comercio de España y su presidente, José Luis Bonet, quien contactó con Catalá el pasado mes de enero para ofrecerle este puesto no retribuido, comenzaron a plantearse la creación de este Centro después de sugerir la unificación de las cortes de arbitraje cuando él todavía era ministro.
En este sentido, la pandemia no ha acelerado su presentación pero Catalá defiende que contribuirá a desatascar la litigiosidad en los juzgados, ahora que el confinamiento ha generado una mayor probabilidad de litigios, como los derivados, por ejemplo, de que las personas o las empresas no puedan atender a sus obligaciones en cuanto a arrendamientos, proveedores, contratos o suministros, entre otros.
Debido a que el pleno del Centro todavía no ha tenido oportunidad de reunirse, sus objetivos serán definidos el próximos mes de septiembre, aunque ya apunta a que tendrán que ser "prudentes, sin crear expectativas excesivamente ambiciosas", pero, eso sí, ampliando su red de mediadores, que ahora comprende a 20 personas.
El exministro recuerda que ya hay muchos abogados, notarios, registradores o incluso psicólogos --por su habilidad de negociación, tan necesaria en la mediación--, que ya trabajan en ello y con los que podrían entablar asociaciones para intensificar la labor de "formación, información y convencimiento" sobre esta alternativa de resolución de conflictos.