España lidera la compra de productos de marca blanca en Europa, por delante de Países Bajos, Reino Unido, Portugal y Alemania
MADRID, 7 Nov. (EUROPA PRESS) -
La facturación del sector de la distribución minorista en España aumentó un 12,7% el pasado año 2023, por encima de la media de países de la Unión Europea (5,5%), según recoge el estudio 'El Retail Europeo 2023-2024', elaborado por la consultora de investigación de mercados GfK - A NielsenIQ Company.
El incremento de casi un 13% de la facturación en el comercio sitúa a España por delante de las principales economías del continente. En Alemania (2,2%), Francia (5,5%) o Italia (2,3%) el crecimiento fue más moderado e incluso en Reino Unido el sector de la distribución experimentó un retroceso del -1%.
El estudio refleja también el aumento del volumen de negocio en países de Europa del Este como Bulgaria (+18%), Rumanía (+14%) y Croacia (+14%).
CUOTA DEL CONSUMO DESTINADA AL RETAIL: BAJA EN UE Y CRECE EN ESPAÑA
Según se explica en el informe, cuanto mayor es el poder adquisitivo, los hogares gastan una menor parte de sus ingresos en artículos de primera necesidad, como alimentos, ropa y otros bienes esenciales. Esto hace que el porcentaje del consumo privado destinado a las tiendas sea más bajo.
En el caso de España se observa un ligero crecimiento de un punto porcentual respecto a 2022. Si desde hace años la proporción era del 36%, en 2023 ha alcanzado el 37%.
En el resto de la UE, por segundo año consecutivo, se ha registrado una bajada hasta el 33,9%, después de las subidas de 2020 y 2021 debido al confinamiento provocado por la pandemia.
En 2023, los ciudadanos de la UE gastaron un 0,5% menos de su dinero en el comercio minorista que el año anterior, a pesar del incremento del poder adquisitivo de la población y del creciente volumen de negocio del comercio.
ESPAÑA APUESTA POR LA MARCA BLANCA
El informe destaca que el porcentaje de compra de productos de la marca del distribuidor en gran consumo en España es del 47%, la mayor cuota de toda Europa.
En 2023 en casi todos los países europeos se observa un crecimiento de las compras de marca blanca en comparación con el año anterior. Sin embargo, a medida que la inflación se aplana, esta tendencia pierde impulso o incluso disminuye.
En Países Bajos, Reino Unido y Alemania, esa proporción también supera el 40%, mientras que en el otro extremo se encuentran países como Turquía, Bosnia-Herzegovina y Bulgaria. Allí, la cuota de las marcas blancas es inferior al 10%.