MADRID, 23 May. (EUROPA PRESS) -
El Comité Europeo de las Regiones ha dado su visto bueno a la propuesta de la Comisión Europa de que las reglas que limitan el déficit y la deuda públicos de los Estados miembro sigan suspendidas durante 2023 pero vuelvan a reactivarse en 2024.
De esta forma, se mantendrá activada la cláusula de escape del Pacto de Estabilidad y Crecimiento por el impacto de la invasión rusa de Ucrania, que se activó en marzo de 2020 por la pandemia.
El Comité de las Regiones ha reaccionado de forma positiva a esta propuesta a través del miembro y ponente en la materia del Comité, Elio Di Rupo, presidente de la región de Valonia y ex primer ministro de Belgica.
"Damos la bienvenida a la propuesta de la Comisión de mantener la cláusula de escape del Pacto de Estabilidad y Crecimiento al menos hasta finales de 2023, tal y como había pedido el Comité Europeo de las Regiones", ha subrayado Di Rupo.
El ponente del Comité ha criticado que esto es insuficiente y que debe ser el "primer paso" para medidas que apoyen mejor a las ciudades y regiones de la Unión Europea. "Sin un cambio fundamental, los límites presupuestarios europeos limitarán la movilización de inversión pública para superar los desafíos sociales, ecológicos y económicos", ha indicado.
Para Di Rupo, la gobernanza económica y presupuestaria dentro de la Unión Europea debe adaptarse a las "nuevas realidades" que deben afrontar las regiones y territorios del bloque comunitario.
Lo que propone Bruselas es que la cláusula general de escape del Pacto de Estabilidad y Crecimiento, activada en marzo de 2020, siga vigente hasta que finalice el año que viene frente a la desactivación prevista para finales del presente ejercicio. Esto supone que los límites del 3% y del 60% del PIB para el déficit y la deuda, respectivamente, sigan congelados.
La Comisión Europea considera que se cumplen las condiciones para mantener esta salvaguarda en 2023 y desactivarla a partir de 2024 dada la incertidumbre generada por la guerra de Ucrania y los riesgos que implica para las perspectivas económicas, considerando el impacto en los precios de la energía y las roturas en la cadena de suministro.