MADRID, 22 Jun. (EUROPA PRESS) -
Deutsche Bank ha elevado sus perspectivas de crecimiento del producto interior bruto (PIB) de España para 2023 en 1,1 puntos porcentuales, hasta el 1,9% ante los menores precios de la energía y el "fuerte apoyo" de las exportaciones, que ha compensado la desaceleración del consumo.
"La economía ha resistido bien en esta primera parte de 2023, beneficiándose de factores exógenos como la rebaja en los precios de la energía, pero también por factores endógenos como la fortaleza de las exportaciones más allá del turismo y un mercado laboral cuyo comportamiento ha sorprendido positivamente", ha indicado la directora de inversiones de Deutsche Bank España, Rosa Duce.
Las previsiones de crecimiento económico para 2024 se han situado en el 1,2%, sin comparativa porque en sus anteriores pronósticos, publicados en noviembre, no incluían este horizonte temporal.
Entre los retos para la economía española, Duce ha indicado el elevado nivel de deuda pública, la caída de la tasa de ahorro de las familias, ya en niveles prepandemia, y la inflación persistentemente elevada.
Respecto a los precios, que están altos tanto en Estados Unidos como en Europa, la experta de Deutsche Bank ha indicado que va a haber más subidas de tipos a ambos lados del Atlántico. Esto probablemente se traduzca en una recesión en Estados Unidos, algo que posiblemente evite la zona euro.
Además, Duce ha apostillado que en Estados Unidos "las condiciones financieras se han endurecido bastante con todo lo que ha pasado con los bancos regionales", lo que ha provocado una restricción adicional del crédito.
De su lado, el responsable de gestión de inversiones de la entidad en España, Alejandro Vidal, ha indicado que los mercados "van a seguir reflejando la evolución del panorama macro". Además, existe una "alta probabilidad" de que haya volatilidad durante los próximos meses.
De esta forma, la estrategia de Deutsche Bank en renta fija pasa por alargar los vencimientos ante la expectativa de que no habrá demasiadas subidas adicionales de tipos. Además, la apuesta es por soberanos y empresas de alta calidad.
En opinión de Vidal, los retornos a corto plazo no cubren totalmente la inflación consolidada, pero de cara al futuro si serán capaces de recoger las expectativas de inflación.
En renta variable, Deutsche Bank apuesta por infraponderar ligeramente pero combinando con una apuesta decidida por aquellos sectores o empresas cuya estructura o negocio sea sólida. En este sentido, Vidal ha destacado el sector industrial o el farmacéutico.