De cumplirse esta posibilidad, se mejoraría en una décima la previsión para 2024 que presentó BBVA Research hace unos días
SAN SEBASTIÁN, 28 Oct. (EUROPA PRESS) -
El director de Análisis Económico de BBVA Research, Rafael Doménech, prevé un crecimiento económico para España del 2,9% este año, aunque no descarta que pueda alcanzarse "incluso" el 3%, mientras que para 2025 estima que el crecimiento será del 2,4%.
Doménech ha participado este lunes en el campus de la universidad de Deusto en San Sebastián, en un encuentro en el que ha impartido la conferencia 'Perspectivas Económicas 2025: Retos y Oportunidades en un Entorno Global Cambiante', en el que ha explicado que estas previsiones se deben a la revisión estadística del INE, que supone "un crecimiento trimestral que ha sido una o dos décimas superior" al previsto.
Así, ha apuntado que "en este tercer trimestre, en tasa anualizada, el crecimiento estaría entre el 2,4% y el 2,8% y, para el cuarto trimestre, los indicadores del mes de octubre dan una tasa de crecimiento de unas seis décimas".
"De hecho, si el crecimiento en el tercer trimestre fuera de siete décimas, y en el cuarto, que conoceremos a finales de enero del próximo año, fuera de seis décimas, el crecimiento en 2024 sería, si no hay revisiones de trimestres hacia atrás, de un 3%", ha añadido.
Según ha detallado, "el consumo público está un 18% por encima de los niveles previos a la pandemia". "El PIB está a 5,7 puntos, es decir, que el consumo público ha crecido más de tres veces lo que ha crecido el PIB". Sin embargo, "lo que va claramente más retrasado es el consumo privado, que apenas ha superado el nivel previo a la pandemia".
Además, Doménech ha incidido en que la inversión "es el componente de este crecimiento que está siendo un lastre en la recuperación". En su opinión, "es claramente el resultado de una política fiscal de estabilización".
En esa línea, ha afirmado que la mejora de la confianza de los consumidores "tiene mucho que ver con el proceso de desinflación, incluso de caída de precios de algunos componentes de la cesta de consumo, y también las caídas en los tipos de interés que ya se han empezado a ver" y esto está permitiendo que "la renta disponible de los hogares esté creciendo mucho, más que el consumo". "Estamos viendo un aumento del ahorro, que sorprende", ha añadido.
Tras destacar que "el proceso de desinflación avanza", ha señalado que "cada vez hay un porcentaje mayor de bienes que tiene una inflación por debajo del 2%, o que la tiene entre el 2% y el 6%, y cada vez un porcentaje menor de la cesta de bienes que la tiene por encima del 6%", y ha citado también la reducción de los tipos de interés con el Euribor "ya por debajo del 3%".
EL PROBLEMA DE LA VIVIENDA
Doménech se ha referido al "problema de la vivienda" en España y ha señalado que, aunque crecen las viviendas en ejecución, "que podrían llegar a tasas de crecimiento del 20% en los próximos dos años", se viene "de niveles muy bajos de viviendas terminadas cada año y la demanda crece más que la oferta". "Tenemos un problema de escasez de oferta que no parece que se vaya a resolver a corto plazo", ha advertido.
En cuanto al consumo público, prevé que "el déficit público alcance el objetivo del 3%" porque "hay un incentivo muy poderoso para que España haga todo lo posible para salir del procedimiento de déficit excesivo, y esto obliga a cumplir con el objetivo del 3%.
"Si no, la senda de ajuste que tendríamos que hacer durante los próximos años todavía sería más intensa, nos exigiría un mayor esfuerzo, sobre todo a corto plazo, en el 2025 y 2026", ha advertido.
Respecto al sector exterior, ha señalado que no se ha dado aún la desaceleración esperada en la exportación de servicios turísticos. "La tasa de crecimiento se viene manteniendo a lo largo del último año sin que veamos señales de desaceleración, pero la seguimos esperando para el año que viene porque muchos destinos turísticos ya están al límite de su capacidad", ha dicho.
Rafael Doménech ha advertido de que mientras "el PIB ha crecido 5,7% en términos reales con respecto a finales de 2019, la ocupación lo ha hecho un 5,6% y la productividad lo ha hecho sólo una décima, es decir, que este fenómeno de crecimiento ha sido, fundamentalmente, un crecimiento extensivo por acumulación de factor trabajo, no por acumulación de capital".
Repecto a la tasa de ahorro, ha considerado que si continúa a los niveles actuales, "podría limitar la mejora de la demanda interna" y, si por el contrario, "se reduce y vuelve a niveles más normales, podría estimular el consumo privado".
Asimismo, ha señalado que, aunque se espera una mejoría en la inversión privada, "es peor, a fecha de hoy, que la que esperábamos hace unos trimestres porque los datos han venido a confirmar los peores de los escenarios en términos de evolución de la inversión privada y hemos tenido que ajustar nuestras previsiones de crecimiento de inversión a la baja".
INMIGRACIÓN
"En algunos segmentos de la población activa, la población de nacionalidad española empieza a perder cada vez más peso y está ya, en términos absolutos, disminuyendo. Esto, en parte, tiene que ver ya con la jubilación del 'baby boom'", ha señalado, al tiempo que ha apuntado que la inmigración "se está concentrando, en algunos casos, en puestos de trabajo de poca cualificación, lo que está provocando un efecto composición que podría estar explicando ese prácticamente estancamiento de la productividad".
De este modo, ha incidido en la importancia de que España "siga siendo un país atractivo" --porque si "estos inmigrantes no tienen vivienda accesible, dejarán de venir aquí"--, y de que estas personas sean "integradas" y "tengan la cualificación necesaria como para sustituir a las personas que se vayan jubilando, pero esto no siempre ocurre".
Por ello, ha apuntado la necesidad de contar con "políticas activas mucho más eficaces que las que tenemos ahora". "Mejoremos la cualificación para cubrir puestos vacantes que son absolutamente necesarios, y que, si no, esos servicios que ahora estamos produciendo se darán en otras partes del mundo con el que competimos", ha alertado.
El director de Análisis Económico de BBVA Research ha asegurado que hay "una incertidumbre sobre la evolución de la política fiscal muy elevada" ya que "a fecha de hoy, no se han presentado todavía los Presupuestos Generales del Estado en el Congreso".
"El plazo era septiembre, no se ha hecho, y no sabemos qué es lo que va a pasar y hay una incertidumbre también muy elevada sobre nuevas figuras impositivas o sobre la conversión de impuestos que se anunciaron como temporales, sobre la imposición a las energéticas o a la banca", ha recordado.
Así, ha asegurado que "todo hace pensar que la única manera de cumplir con el plan ante Bruselas va a ser con una subida de impuestos que no conocemos y, por lo tanto, sabemos que eso va a tener un coste adicional en términos de actividad, inversión, crecimiento y empleo".