Los ministerios recortarán su presupuesto en un 16% y el coste de los intereses de la deuda será "importante"
MADRID, 24 Sep. (EUROPA PRESS) -
El Consejo de Ministros ha aprobado el proyecto de Ley de Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2011, que incluyen un recorte del gasto no financiero del 7,9%, superior al previsto en junio, del 7,7%, hasta los 122.022 millones de euros frente a los 122.256 millones iniciales, sin contabilizar la financiación de las administraciones territoriales.
En rueda de prensa, la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, y la vicepresidenta económica, Elena Salgado, defendieron que las tres señas de identidad de las cuentas públicas del próximo año serán, además de la "austeridad", "la recuperación, la estabilidad y la confianza".
Según De la Vega, los Presupuestos, que serán presentados en el Congreso de los Diputados el próximo 30 de septiembre, facilitarán, junto con la reforma laboral, la Ley de Economía Sostenible y la reforma del sistema de pensiones, "la recuperación económica y el empleo".
Por su parte, Salgado destacó su carácter "social" y subrayó que se trata de los presupuestos "más austeros de los últimos años en términos relativos porque, en términos absolutos, los ministerios contarán con el presupuesto equivalente a 2006".
LIGERA MEJORA DEL DÉFICIT PREVISTO EN 2009.
Además, desde el Gobierno se sostiene que el proyecto de Ley "se subordina absolutamente" a la reducción del déficit y se asegura que los compromisos de estabilidad presupuestaria se cumplirán tanto en 2010 como en 2011. Por lo pronto, Salgado dijo que el déficit de las administraciones públicas en 2009, fue del 11,1%, "un poquito inferior" al 11,2% inicialmente anunciado.
Por tanto, las previsiones siguen apuntando a una reducción del déficit de las administraciones públicas del 9,3% en 2010 y de 6% en 2011, con la vista puesta a su reducción hasta el 3% en 2013.
Asimismo, el Gobierno espera que la deuda pública siga siendo en 2011 "considerablemente inferior" a la de los países de la zona euro, al pasar del 62,8% del PIB previsto en 2010 al 68,7% en 2011, unos 20 puntos porcentuales menos que las ratios cercanas al 80% del PIB del entorno europeo. Además, la deuda del Estado se reducirá del 47,8% al 51,5% del PIB.
EL GOBIERNO REDUCE AÚN MÁS EL GASTO.
En el capítulo de gastos, Salgado hizo hincapié en que el techo de gasto no financiero del Estado se reducirá un 7,9%, hasta los 122.022 millones de euros, respecto al de 2010 en términos homogéneos, sin contabilizar la financiación de las administraciones territoriales, cuya cuantía está condicionada por la entrada en vigor del nuevo modelo de financiación autonómica.
Sumando estas cuantías, el gasto se sitúa en los 150.056 millones de euros. Sin embargo, en comparación con el gasto real previsto para 2010, la reducción del gasto será del 3%, aunque Salgado advirtió de que "ese porcentaje lleva dentro un incremento importante de partidas como el gasto de intereses de deuda".
Preguntada en este punto por el coste que tendrá el pago de los intereses de la deuda emitida, Salgado eludió dar cifras concretas "por cortesía parlamentaria", pero aseguró que la partida prevista "va a ser más que suficiente" para hacer frente a su coste.
Además, Salgado señaló que el Gobierno ha elaborado los Presupuestos contando con que los tipos de interés sigan siendo "moderados" en 2011 al no esperarse nuevas tensiones inflacionistas en la UE.
Por otro lado, Salgado avanzó que los Presupuestos para 2011 incluirán una reducción del gasto de los ministerios del 16%, aunque las partidas de Investigación y Desarrollo y Educación serán las "menos afectadas", puesto que "son fundamentales" para consolidar "un nuevo modelo económico más resistente a la crisis". En conjunto, los gastos de funcionamiento del Estado, excluidos los destinados a procesos electorales, descenderán un 6,7%.
Asimismo, las cuentas acogen la congelación de las retribuciones del personal al servicio del sector público, con lo que se consolida la rebaja del 5% en los salarios de los funcionarios aplicada desde el mes de junio, y la reducción de la oferta pública de empleo, con una tasa de reposición del 10%.
Por último, en la partida de gastos se incluye un incremento del 1% de las pensiones mínimas, ya que estas prestaciones no están afectadas por la congelación aprobada para 2011 por el Gobierno.
LOS INGRESOS VAN BIEN Y NO NECESITAN MEDIDAS ADICIONALES.
Por el lado de los ingresos no financieros, el Gobierno prevé que alcancen los 106.020 millones de euros en 2011, una vez descontada la participación en la recaudación de las administraciones territoriales.
Así, el Ejecutivo confía en que la recuperación económica y el efecto de las medidas incluidas tanto en los presupuestos de 2010 como en el decreto de recortes permitan que los ingresos sigan creciendo el próximo año.
Si bien, reconoce que las medidas fiscales para 2011, que recogen una subida del IRPF para las rentas más altas, no tendrán una influencia significativa en la previsión de ingresos.
Por lo pronto, y a la espera de que el secretario de Estado de Hacienda, Carlos Ocaña, ofrezca los datos de ejecución presupuestaria hasta el mes de agosto, Salgado garantizó que los ingresos "van mejor de lo esperado". Según dijo, el Gobierno tiene, "no la seguridad, pero sí la convicción" de que estas previsiones de ingresos se cumplirán también el año que viene.
En este sentido, la vicepresidenta económica del Gobierno aseguró que no está en las previsiones del Ejecutivo que sea necesario tomar ninguna medida adicional para aumentar los ingresos públicos.