SANTANDER, 23 Jun. (EUROPA PRESS) -
El Banco Central Europeo (BCE) ha subrayado la importancia de evitar efectos de segunda ronda en el mercado laboral y en la indexación de diferentes partidas presupuestarias o prestaciones que provocasen la "cronificación" del repunte de la inflación observado y que obedece, de momento, a factores técnicos y de base.
"Este repunte de la inflación es consecuencia de efectos temporales técnicos y de base en gran parte (...) Si hubiera efectos de segunda ronda, esta evolución temporal al alza de la inflación se haría más permanente y la reacción de la política económica debería ser distinta", ha afirmado el vicepresidenta de la institución, Luis de Guindos, durante una conferencia organizada por APIE en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP).
En este sentido, el exministro español de Economía ha señalado la necesidad de tener en consideración los efectos de base en los incrementos de los precios y la naturaleza temporal de estos, que pueden llevar la inflación a rondar en promedio el 3% en la zona euro.
"No podemos relajarnos, si de algún modo empezamos a ver efectos de segunda ronda este repunte temporal se puede cronificar", ha advertido Guindos, para quien, de momento, en el mercado laboral "no se están viendo", aunque ha advertido del fuerte componente de indexación existente en algunas economías que puede enviar señales desde el sector publico al privado.
De este modo, sin entrar a valorar subidas como las del salario mínimo interprofesional o las pensiones en España, Guindos ha señalado que hay economías más indexadas que otras.
"Lo que no podemos hacer es cronificar ese aumento temporal de la inflación (...) Estaremos vigilantes a cualquier señal de cronificación", ha apostillado en referencia a posibles efectos de segunda ronda que afecten al mercado laboral y a las indexaciones.
RECUPERACIÓN INTENSA.
Por otro lado, el vicepresidente del BCE ha reiterado el optimismo de la institución de cara a una fuerte recuperación de la actividad de la zona euro en el resto del año gracias a la reapertura de las economías por los progresos en las campañas de vacunación.
"Esperamos que en el segundo trimestre y en la segunda mitad del año haya un crecimiento muy importante de la zona euro", ha afirmado Guindos, destacando que, además, por primera vez desde la pandemia el BCE ve que los riesgos para el crecimiento están equilibrados.
De este modo, confía en que la zona euro alcanzará el nivel de renta anterior a la crisis aproximadamente en el primer trimestre de 2022, aunque ha reconocido la importante dispersión entre países, pues en Alemania se alcanzará ya este año y en Italia o España habrá que esperar a finales del próximo.
En este sentido, Guindos ha insistido en la importancia de llevar a cabo una retirada prudente y gradual de las medidas de apoyo fiscales y monetarias desplegadas durante la pandemia para dar continuidad en el tiempo al fuerte repunte de la economía.
"Tampoco nos podemos pasar porque eso podría dar lugar a riesgo moral y a la zombificación de la economía, pero si tenemos que equivocarnos mejor hacerlo por el lado de la prudencia", ha indicado.
Asimismo, dado el deterioro esperado de las posiciones fiscales de los países de la eurozona será clave que una vez superada la pandemia los gobiernos cuenten con planes de consolidación prudentes y creíbles.