MADRID, 30 May. (EUROPA PRESS) -
Los ingresos por cotizaciones a la Seguridad Social alcanzaron hasta abril los 45.922 millones, cifra que supera en más de 3.100 millones la correspondiente al mismo periodo del año anterior, según datos ofrecidos por el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones.
Con respecto al periodo de enero a abril de 2019, antes de la pandemia, el incremento fue de 5.075,35 millones, es decir, una cifra un 12% más alta que entonces. Si se tiene en cuenta la media móvil de los últimos doce meses, el incremento interanual de los ingresos por cotizaciones sociales se acerca al 10%.
En términos del PIB, también se aprecia el incremento de los ingresos por cotizaciones sociales, situándose en los últimos meses por encima del 12% del PIB, un punto y medio más que antes de la pandemia.
De su lado, las cuentas de la Seguridad Social presentaron un saldo negativo, a 30 de abril de 2022, de 890,01 millones de euros. Esta cifra se obtiene de la diferencia entre unos derechos reconocidos por operaciones no financieras de 53.853,6 millones de euros, que mostraron un incremento del 1,7%, y obligaciones reconocidas de 54.743,6 millones, que crecieron en un 3,5% interanual.
Del volumen total de derechos reconocidos, el 90,4% correspondió a las entidades gestoras y servicios comunes de la Seguridad Social y el 9,6% restante a las mutuas colaboradoras con la Seguridad Social. En cuanto a las obligaciones, el 90,3% fue reconocido por las entidades gestoras y servicios comunes y el 9,7% por las mutuas colaboradoras con la Seguridad Social.
En términos de caja, la recaudación líquida del sistema alcanzó los 52.912,8 millones de euros, con un incremento del 4,3% respecto al ejercicio anterior, mientras los pagos presentaron un aumento del 3,7%, hasta alcanzar los 54.663,4 millones de euros.
INGRESOS NO FINANCIEROS
Las cotizaciones sociales ascendieron a 45.922 millones de euros, lo que supone un incremento del 7,4% respecto a los ingresos del mismo periodo del ejercicio 2021 (3.170,6 millones de euros más).
Este incremento se vio impulsado por la positiva evolución de los ingresos por cotizaciones de ocupados, que experimentaron un incremento interanual del 8,9% (3.537,2 millones de euros más). El departamento liderado por José Luis Escrivá subraya que se trata del mayor aumento interanual en abril de la última década.
Por su parte, las cotizaciones de desempleados registraron una disminución del 11,6% (366,6 millones de euros menos) por el descenso del número de parados.
Las transferencias corrientes ascendieron a 7.527,5 millones de euros, con una disminución del 23,8% interanual. La partida más significativa correspondió a las transferencias recibidas del Estado y Organismos Autónomos que sumaron un total de 6.164,2 millones, un 27,8% menos. Esta disminución tiene su origen, principalmente, en la percepción de menores ingresos del Estado para financiar los complementos por mínimos de pensiones respecto al mismo periodo del año anterior (1.187,5 millones de euros menos) y para el cumplimiento de la Recomendación Primera del Pacto Toledo 2020 que, a 30 de abril, no se recibió importe alguno.
GASTOS NO FINANCIEROS
Las prestaciones económicas a familias e instituciones alcanzaron 51.139,7 millones, un 3,3% más que en el mismo periodo de 2021. Esta cifra representa un 93,4% del gasto total realizado en el sistema de Seguridad Social.
La mayor partida, 46.995,6 millones, correspondía a pensiones y prestaciones contributivas, con un aumento de un 3,1% (1.404,6 millones de euros más)
En un análisis detallado del área contributiva, el gasto en pensiones (incapacidad permanente, jubilación, viudedad, orfandad y en favor de familiares) se incrementaron un 6,1% hasta los 41.130,7 millones de euros, debido al aumento del número de pensionistas (1,1%), a la elevación de la pensión media (5,4%), así como a la revalorización general del 2,5% para las pensiones contributivas.
Respecto a los subsidios de incapacidad temporal, el gasto total aumentó un 2,3% respecto al mismo periodo del año anterior, hasta alcanzar los 4.238,9 millones de euros. El mayor importe correspondía al subsidio temporal por contingencias comunes de 3.254,7 millones de euros (un 6,1% más), mientras el subsidio temporal por contingencias profesionales se cifraba en 531,3 millones de euros (30,3% menos). La incapacidad temporal por procesos derivados del Covid-19 alcanzó un importe acumulado de 452,9 millones de euros, un 32,4% menos que en el mismo periodo del ejercicio anterior.
Las prestaciones en concepto de nacimiento y cuidado de menor, corresponsabilidad en el cuidado del lactante, riesgo durante el embarazo y durante la lactancia natural y cuidado de menores afectados por cáncer u otra enfermedad se incrementaron interanualmente un 22,8% hasta alcanzar los 1.239,1 millones.
El gasto acumulado en prestaciones para autónomos disminuyó un 87,2% respecto al mismo periodo del ejercicio 2021, cifrándose en 186 millones de euros. Esta disminución viene dada por una menor necesidad de protección respecto a la habida durante la pandemia.
Las pensiones y prestaciones no contributivas, incluidos los complementos por mínimos de las pensiones contributivas, alcanzaron los 4.144,1 millones de euros, un 6,1% más que en el mismo periodo del ejercicio anterior, motivado por la revalorización general del 3% para pensiones mínimas y no contributivas, incluido el Ingreso Mínimo Vital.
De dicho importe, se destinó a pensiones no contributivas y complementos por mínimos 2.754,9 millones (un 2,7% más), y a subsidios y otras prestaciones 1.389,1 millones, de los cuales 1.304,0 millones de euros corresponden a Ingreso Mínimo Vital y prestaciones familiares, un 13,6% más respecto del año anterior.