MADRID 27 May. (EUROPA PRESS) -
La victoria de Claudia Sheinbaum, la candidata de Morena (el partido gobernante del presidente Andrés Manuel López Obrador), en las elecciones presidenciales del próximo domingo 2 de junio tendrá implicaciones "positivas" para los inversores en el país, según un informe de AXA Investment Managers (IM).
La exalcaldasa de Ciudad de México, que se ha convertido en la principal competidora en la carrera electoral que concluye esta semana, tiene, según las encuestas, las mayores opciones de ganar, lo que supondría dar continuidad a las políticas de la actual administración de López Obrador.
Este continuismo permitirá propiciar un entorno económico "estable" y "atractivo" par los inversores en bonos, teniendo en cuenta, entre otros, el compromiso de Sheinbaum con la disciplina fiscal y la estabilidad de la deuda pública.
Además, su enfoque en la inversión en energías renovables puede presentar oportunidades significativas en el sector de la energía verde, atrayendo a inversores interesados en proyectos sostenibles y respetuosos con el medio ambiente.
Sheinbaum mantiene una postura favorable al 'nearshoring', haciendo hincapié en que las inversiones deben estar en armonía con la política energética de la nación, proporcionar oportunidades de empleo de alta calidad, defender los intereses de la comunidad local y adherirse a rigurosos criterios de descarbonización.
En su plan se priorizan sectores como semiconductores, electrónica, electromovilidad, dispositivos médicos y agroindustria, con el objetivo de capitalizar las fortalezas distintivas de varias regiones de México y organizarlas en corredores industriales.
Con todo, los esfuerzos Sheinbaum podrían verse obstaculizados por la retórica nacionalista y antiempresarial ocasional de Morena, junto con el fracaso del partido para abordar los problemas del sector energético. En contraste, la postura más pro-empresarial de Xóchitl Gálvez, su principal adversaria, sugiere un potencial para un nearshoring más fuerte bajo su administración.
SECTOR ENERGÉTICO, PRINCIPAL DESAFÍOS
Estas elecciones también presentan una oportunidad para abordar cuestiones económicas apremiantes como la revitalización del sector energético, el aprovechamiento estratégico de las oportunidades de nearshoring y la próxima revisión del T-MEC con Estados Unidos y Canadá.
México necesita aprovechar las tensiones geopolíticas globales para aumentar su atractivo para las actividades de nearshoring si quiere impulsar su crecimiento potencial del PIB, relativamente bajo.
En este contexto, la próxima revisión del T-MEC en 2026 será crucial, aunque su resultado sigue siendo incierto, sobre todo si Donald Trump fuera reelegido como presidente de Estados Unidos.
Además, México también necesita revitalizar su envejecido sector energético para garantizar un suministro de energía asequible a su gran sector industrial, lo que hace que sea más atractivo para las empresas extranjeras invertir en el país.
Años de negligencia en la inversión en infraestructura han exacerbado los desafíos que enfrenta el sector industrial de México, con la energía emergiendo como una preocupación crítica.
Una encuesta de 2023 reveló que más del 90% de los parques industriales privados tuvieron problemas con la electricidad fiable, lo que refleja las repercusiones de la fuerte dependencia del sector del petróleo, que representa aproximadamente el 43% del consumo de energía primaria.