El PSOE ha reclamado este martes la comparecencia del ministro de Economía, Industria y Competitividad, Román Escolano, ante el Congreso por dejar a la economía y ciudadanía española en "una situación de riesgo" en caso de futuras crisis "en favor de países como Alemania". Así lo ha manifestado su portavoz en el Congreso, Margarita Robles, que tras la Junta de Portavoces ha acusado en rueda de prensa al Gobierno de "dejar a España desarmada ante la Unión Europea, dejando de lado cualquier política que pueda permitir reforzar el euro". De esta forma, ha manifestado su rechazo a la decisión del Gobierno de renunciar a la posibilidad de impulsar un sistema de eurobonos o de un seguro de empleo europeo en la negociación del futuro económico y político de la Unión Europea (UE), pues cree que sus propuestas suponen "disminuir la solidaridad" entre los socios comunitarios. "Nos parece muy grave que, sin contar con el Parlamento, se dirija a la UE haciendo propuestas que no sólo no van a reforzar el euro, sino que van a suponer una situación de riesgo para la economía y ciudadanía española en casos de crisis económica si se pudieran producir", ha manifestado. En este sentido, ha recordado que España "es una de las economías más endeudadas en relación al PIB", y que la renuncia a instrumentos que antes se defendían desde el propio Gobierno supone "una dejación de competencias". Para Robles, "el Gobierno se olvida de que no tiene mayoría parlamentaria y que le importa muy poco la situación de los ciudadanos de los españoles y demuestra su carencia de peso político", ha espetado. Este asunto lo ha abordado también en su reunión plenaria de este martes la Ejecutiva Federal del PSOE. En rueda de prensa en la sede del partido en Ferraz, el secretario de Organización, José Luis Ábalos, ha tildado de "absoluta deslealtad" que el Gobierno de Rajoy fije sin consultar con el resto de partidos la posición de España ante el futuro de la unión política y monetaria de la UE. Ábalos ha subrayado que las políticas diseñadas en el seno de la UE implican una "cesión de soberanía" que obliga al Gobierno a compartir la posición española con el resto de grupos políticos, y mucho más cuando el Ejecutivo se encuentra en minoría, como es el caso del Gobierno de Rajoy en esta legislatura.