BBVA rechazará proyectos de más de 50 millones de dólares que no cumplan los estándares sociales y medioambientales del Banco Mundial
MADRID, 18 May. (EUROPA PRESS) -
BBVA se ha convertido en el primer banco español en firmar los 'Principios de Ecuador', la guía social y medioambiental definida por el Banco Mundial para la financiación de grandes proyectos de inversión: así, desde ahora, la entidad rechazará aquellas propuestas que no cumplan unos estándares mínimos. Según el director de Responsabilidad Social Corporativa de BBVA, José Angel Moreno, esta decisión "responde a la filosofía del banco más que al análisis puro y duro de coste y beneficio".
Los Principios de Ecuador, iniciativa lanzada en 2003 por la Corporación Financiera Internacional (IFC), 'brazo privado' del Banco Mundial, pretenden promover la concienciación medioambiental y social de la actividad financiera, con el fin de que los proyectos en los que invierten sus fondos no sean dañinos para el entorno. Con la adhesión de BBVA, son ya 23 los firmantes de esta iniciativa.
"La adhesión a los principios de Ecuador constituye un paso muy importante en el compromiso de BBVA de compatibilizar de manera armónica las dimensiones económica, social y medioambiental de su actividad, avanzando así hacia un modelo de desarrollo sostenible", afirma el presidente de la entidad, Francisco González, en un comunicado. Hace poco más de un año que la entidad empezó a estudiar la posibilidad de adherirse.
Así, BBVA se compromete a no financiar directamente proyectos de importe superior a los 50 millones de dólares (unos 42 millones de euros) que no cumplan los estándares de la IFC. Los proyectos pasarán por un proceso de evaluación a cargo de agentes externos especializados, y serán clasificados en tres categorías: 'A' para las de 'Riesgo Alto', 'B' para el 'Riesgo Medio' y 'C' para el 'Riesgo Bajo'.
Entre los criterios contemplados por el IFC destacan el uso de recursos naturales renovables, la protección de la salud, la diversidad cultural y la biodiversidad, la prevención de incendios y riesgos para la seguridad, los impactos socioeconómicos, los sistemas de adquisición y uso del suelo, los reasentamientos involuntarios de población, el control de la contaminación o la eficiencia en la producción.
EVALUACION Y SEGUIMIENTO
Según explicó a Europa Press José Angel Moreno, este mecanismo supone que los proyectos clasificados como de riesgo alto, como puedan ser los de la industria extractiva en selvas tropicales, pueden ser rechazados por los firmantes si el resultado de la evaluación es muy negativo, o ser aceptados "pero justificando ante los demás firmantes", "aunque lo normal es que no se firme".
En caso de que la evaluación no sea tajantemente negativa, el contrato debe incluir cláusulas que prevengan o mitiguen los problemas detectados. Además, también puede implantarse un "plan socio-ambiental", que incluye consultas previas con agentes sociales, Administraciones locales o comunidades indígenas, y un sistema de seguimiento a cargo de la agencia de pre-evaluación o de una entidad similar. Según Moreno, esta 'vigilancia' también corre a cargo del Departamento de Banca Global e Inversiones del BBVA.
"En muchas operaciones todo esto ya se estaba haciendo aunque BBVA no hubiera firmado los 'Principios' hasta ahora, porque afecta a la reputación del banco", señaló Moreno, apuntando que en realidad se trata de "auto-obligarse un poco más y someterse a la fiscalización de la IFC y de los demás socios".
Moreno reconoció que estos procesos de control generan "un coste adicional" tanto para el banco como para las empresas que puedan verse más o menos afectadas, aunque señaló que estas últimas ya tienen en cuenta los criterios de sostenibilidad al definir sus proyectos. En este sentido, el responsable del BBVA precisó que la entidad ha mantenido contactos con empresas para informarles de su adhesión a la iniciativa de la IFC.
"A medio plazo compensa absolutamente --indicó el director de RSC-- y va a ser además un camino obligado" que sin duda animará a otros bancos españoles. Moreno también destacó que el BBVA se convierte de esta forma en el primer banco con fuerte presencia en América Latina en adherirse a los 'Principios', lo que es especialmente importante dado que es en esta región donde esta herramienta tendrá mayor utilidad.
ROMPER CON LA ANOMALIA
En declaraciones a Europa Press, el analista de la Fundación Ecología y Desarrollo Jesús Llaría explicó que la firma por parte de BBVA "es una buena noticia que rompe con una situación anómala": el que "ninguna entidad financiera española hubiera adoptado una de las iniciativas internacionales más destacadas para la evaluación de los riesgos sociales y medioambientales de los proyectos que financian en países en desarrollo".
Ecodes, una de las principales impulsoras de la RSC y de la inversión socialmente responsable en España, destacó la "enorme" capacidad de los bancos para influir en los impactos medioambientales y sociales de determinados proyectos, con las consecuencias que ello tiene para cuestiones como la biodiversidad, el uso de recursos naturales y la salud de la población.
Llaría apuntó, en todo caso, que "la confianza que se logra" al adherirse a los 'Principios' será "mayor y más firme" en la medida en que la entidad comunique el impacto de este compromiso en su negocio y en la sociedad, "algo que los propios 'Principios de Ecuador' no requieren, pero tampoco excluyen".
BBVA se suma así a ABN AMRO, Bank of America, Barclays, CIBC, Citigroup, Crédit Lyonnais, Crédit Suisse, Dexia, Dresdner Bank, Eksport Kredit, HSBC, HVB, ING, KBC, MCC, Mizuho, Rabobank, Royal Bank of Canada, Standard Chartered Bank, Royal Bank of Scotland, WestLB y Westpac. El último en sumarse, la semana pasada, fue Eksport Kredit Fonden (EKF), la primera institución financiera danesa y la primera agencia de créditos a la exportación del mundo que ha firmado.