MADRID, 17 Ene. (EUROPA PRESS) -
El presidente del Gobierno español Pedro Sánchez, ha expresado la importancia de que la Unión Europea alcance un acuerdo con Estados Unidos para resolver sus diferencias tras las millonarias medidas de ayuda contra la inflación aprobadas por la Administración Biden, aunque ha subrayado la necesidad de que también Europa "haga sus deberes".
"Es importante que hagamos nuestros deberes y revisemos nuestra política industrial", ha explicado Pedro Sánchez en su intervención en el Foro Económico Mundial, que se celebra en la localidad suiza de Davos, donde ha asegurado que esta cuestión será algo en lo que se enfocará la presidencia española del Consejo de la Unión Europea en la segunda mitad de 2023.
En este sentido, el presidente español ha defendido la necesidad de que los aliados occidentales estén cada vez más cerca en vez de más divididos.
Sin embargo, al mismo tiempo ha insistido en que "hay deberes que hacer", incluyendo la revisión de las reglas internas europeas sobre ayudas de Estado.
De este modo, Sánchez ha recordado que el Gobierno español ha enviado sus propuestas a la Comisión Europea sobre el mercado eléctrico, las ayudas de Estado y lo que ha estado haciendo durante los últimos años "y proponiendo diferentes medidas para una Europa más fuerte e integrada", porque "los retos comunes requieren de respuestas comunes".
En este sentido, ha cuestionado en su discurso si se está haciendo suficiente para luchar contra desafíos como la desigualdad y el cambio climático o si se está aprovechando la crisis para ralentizar la transición verde.
"Hay mucho más en juego que la evolución de nuestras economías el próximo trimestre", ha advertido Sánchez, asegurando que España estará en primera línea para abordar los grandes desafíos como la pandemia, la guerra en Ucrania, la crisis energética o alimentaria.
Así, aunque ha reconocido que "2023 no será un gran año para la economía", ha dejado claro que España está mostrando signos de resiliencia y fortaleza, con un crecimiento superior a la media de la eurozona y la inflación más baja de la región, así como estabilidad institucional.