BRUSELAS, 28 Oct. (EUROPA PRESS) -
El Parlamento de la región belga de Valonia ha dado luz verde este viernes a la firma del acuerdo de libre comercio entre la Unión Europea y Canadá por 58 votos a favor y cinco en contra, ha informado la cadena francófona pública RTBF.
El visto bueno del Parlamento valón es clave para desbloquear la firma del acuerdo comercial entre la UE y Canadá, que respaldan los Veintiocho pero que fue bloqueado por las preocupaciones de Valonia.
"Tenemos un tratado mejor. No es perfecto pero es un tratado mejor. Un CETA corregido, un CETA mejorado", ha resumido durante el debate previo al voto el presidente valón, Paul Magnette, que ha insistido con todo que el acuerdo beneficia "diez veces más" a Canadá que a la Unión Europea si se compara el beneficio estimado --12.000 millones de euros para la UE y 8.000 millones para Canadá-- teniendo en cuenta la población.
"Nunca aceptaremos un CETA que contemple mecanismos de arbitraje privado. Hemos condicionado nuestra ratificación a la puesta en marcha de una verdadera jurisdicción", ha avisado el dirigente valón, que ha recordado que Bélgica someterá el tribunal de arbitraje a la opinión del Tribunal de Justicia de la Unión Europea.
El voto se produce después de que el Gobierno federal belga y los ejecutivos de las regiones anunciaron acuerdo este jueves que resuelve las objeciones de Valonia al tratado comercial, levantado el veto que aún mantenía la región francófona de Bélgica al acuerdo.
El Parlamento de la Federación Valonia-Bruselas y el Parlamento de Bruselas también ha dado luz verde a la firma del CETA este viernes y el Gobierno de la comunidad germanófona también ha dado su visto bueno al acuerdo.
Las autoridades belgas han acordado una declaración que, sin embargo, no modifica ni el documento del acuerdo comercial ni la declaración conjunta que la UE y Canadá elaboraron para aclarar algunas cuestiones que planteaban reservas en algunos Estados miembros.
Las principales demandas de Valonia estaban relacionadas con la protección de productos agrícolas, el reconocimiento de denominaciones de origen y el sistema de elección de jueces que compondrán el tribunal de arbitraje que resolverá litigios entre los estados y las empresas.
Uno de los puntos claves del acuerdo interno en Bélgica es que el país pedirá una opinión del Tribunal de Justicia de la UE sobre la compatibilidad del tribunal de arbitraje con las normas europeas y que se reserva el derecho de evaluar regularmente el impacto socioeconómico y medioambiental de la aplicación provisional del acuerdo.
Los Gobiernos europeos dieron su visto bueno, a nivel de embajadores, a los cambios acordados entre las autoridades belgas este jueves para desbloquear la firma del CETA, decisión que aún debe ser formalizada por procedimiento escrito a lo largo de este viernes. El plazo acaba a medianoche.
El objetivo era firmar el acuerdo comercial en la cumbre entre la UE y Canadá prevista en Bruselas este jueves, aunque se canceló debido al bloqueo de Valonia al acuerdo, aunque se espera poder reprogramarla en próximas fechas.
La firma del acuerdo daría paso a la votación por parte del Parlamento Europeo. Si la Eurocámara da su visto bueno, el CETA podrá empezar a aplicarse, aunque de forma provisional y parcial, a la espera de que todos los estados miembros lo ratifiquen. Precisamente el tribunal de arbitraje queda fuera de esta aplicación temporal.