Prosegur, Eulen y Securitas vigilarán las vías y las estaciones de tren por 48 millones

MADRID, 20 Dic. (EUROPA PRESS) -

Prosegur, Eulen y Securitas se han adjudicado el contrato de vigilancia y seguridad de las líneas del tren, las estaciones y el resto de instalaciones e infraestructuras ferroviarias del país durante el próximo año 2018 por un importe de 48,7 millones de euros, según informó Adif.

El contrato cuenta con la posibilidad de ser prorrogado un año más, así como de añadir la prestación de servicios adicionales, lo que elevaría su importe total hasta los 87,93 millones de euros.

Adif, ente público dependiente del Ministerio de Fomento promotor y gestor de la infraestructura ferroviaria, ha contratado la seguridad de sus activos a través de un concurso público repartido en seis lotes en función de las distintas zonas greográficas.

Así Proseguir se ha hecho con cuatro de los seis lotes del contrato, que suman un importe total de 38,19 millones de euros. La empresa se encargará de realizar estos servicios en la zona centro (Comunidad de Madrid y parte de Castilla-La Mancha), la zona Este (el resto de esta última comunidad, además de Valencia y Murcia) la zona Sur (Extremadura y Andalucía), el Noreste (Cataluña y Aragón).

De su lado, Eulen se ha adjudicado por 7,11 millones de euros la seguridad de las infraestructuras del Noroeste, esto es, de las regiones de Asturias, Galicia y Castilla y León, mientras que, de su lado, Securitas se encargará de las del Norte (País Vasco, Cantabria, La Rioja y Navarra) por 3,35 millones.

NUEVO MODELO.

Adif indicó en un comunicado que este contrato supone abordar un nuevo modelo de prestación de servicios de seguridad en sus instalaciones, para adecuarlo a cambios sociales y adaptarlo a los nuevos retos de corto y medio plazo.

Asimismo, con el nuevo contrato se pretende dotar al servicio de mayores capacidades y soluciones técnicas para incrementar los niveles de seguridad activa y "garantizar la operatividad y reducir el riesgo en todas las infraestructuras".

De esta forma, el contrato abarca tanto el actual tamaño de la red ferroviaria como el futuro incremento de las instalaciones como consecuencia de las nuevas líneas y estaciones AVE que se pongan en servicio.